Las Navidades de este 2020 prometen ser bastante atípicas y, entre otras muchas cosas, la reducción de gastos será una regla básica para miles de hogares en los que la falta de ingresos obliga a ajustarse el cinturón. Sin embargo, recortar nuestro presupuesto navideño puede convertirse en una oportunidad para hacer uso de nuestra creatividad y construir buenos ratos en familia en busca de ideas para, por ejemplo, decorar el árbol de Navidad sin tener que desembolsar tanto dinero. ¿Cómo decorar un árbol de Navidad barato?

La Navidad es una época marcada por un aumento exponencial del consumo, algo que, en realidad, poco tiene que ver con esta festividad. Por eso tal vez sea un buen momento (aunque no se trate de una decisión del todo voluntaria) para repensar nuestros hábitos y reestructurar nuestras prioridades de gasto familiar. Es el caso de las decoraciones navideñas: miles de familias gastan dinero cada año en árboles, bolas decorativas, luces y demás material que se suma a la factura global de estas fechas. Se trata de un gasto que bien puede reducirse si usamos nuestra imaginación y acudimos al reciclaje, las manualidades y los materiales de bajo coste.

Por ejemplo, una manera de decorar tu árbol sin invertir en nuevos adornos es crearlos tú mismo. El clásico imprescindible en cualquier árbol es la bola de Navidad y, en este caso, algo tan común y tan económico como un globo puede servirte como estructura base para crear formas redondeadas con cualquier material que te apetezca: papel, cuerda, fieltro, tela, hojas secas, nieve artificial, purpurina... Normalmente bastará con utilizar cola blanca o algún tipo de pegamento flexible para fijar la estructura y darle rigidez. Una vez seca la pieza, podrás explotar el globo y terminar de decorarla, o incluso seguir forrándola con nuevos materiales para darle un toque más sofisticado. Por último, cierra la pieza con una cuerda o lazo para poder colgarla de las ramas del árbol.

Si no quieres limitarte al formato redondeado, también puedes crear piezas planas superponiendo distintas capas de material (por ejemplo, de fieltro) para crear un motivo navideño personalizado que puedas colgar de tu árbol, o incluso moldear figuritas de barro o de papel, o dar forma y decorar elementos de reciclaje que ya existan en casa para darles una segunda vida (cartón, corcho, etc.)

Además, es posible utilizar objetos que encontramos en la naturaleza y que se asocian con este momento del año, como pueden ser piñas, ramas secas... Basta un paseo en medio de la naturaleza para recolectar algunas piezas y buscar la manera de convertirlas en adorno. Una pistola de silicona, un punzón, cinta para colgar, pintura, purpurina... pueden ayudarte a crear verdaderas obras de arte con objetos cotidianos y absolutamente gratuitos. También podrás crear bonitos centros de Navidad.

Además, puedes crear tus propias estrellas (o cualquier forma que se te ocurra) utilizando alambre, unos alicates y lazo de distintos colores (incluso reutilizar telas de tonos navideños procedentes de prensas que ya o utilices). Simplemente crea la forma que desees y luego forra cuidadosamente la estructura utilizando el lazo o la tela, creando las combinaciones que quieras y ayudándote de aguja e hilo o de una pistola de silicona para fijar la pieza. También puedes añadir purpurina o cualquier tipo de brillo, pintura de colores...

Por último, una alternativa a las luces de Navidad (que, además de costar dinero, generan consumo eléctrico y resultan poco agradables para la vista) es llenar toda tu casa de velas. Una manera sencilla y muy económica de protegerlas creando un ambiente acogedor y sin peligro de incendio es utilizar pequeños tarros de cristal (como los de los yogures) para introducirlas. Puedes decorar estos tarros con cinta marrón, lazos de colores... así como pintarlos o añadirles brillo con productos de manualidades. También colgarlos de cualquier punto utilizando cuerda y teniendo mucho cuidado para que queden colocados de forma estable y segura.