El Consorcio de Compensación de Seguros (CCS) estima en 445 millones de euros las pérdidas ocasionadas por los 65.000 siniestros provocados por la DANA durante la segunda semana de septiembre, especialmente en las regiones de Alicante y Murcia. Esta gota fría ha sido la segunda más cara para el sector de los seguros en la historia reciente de España, después de las inundaciones del País Vasco de 1983.
A nivel mundial, las pérdidas aseguradas por catástrofes entre 2017 y 2018 fueron de 219.000 millones de dólares. "Ha sido el peor bienio de la historia para el sector asegurador", ha afirmado el Consejero Delegado de Swiss Re en España y Portugal, Santiago Aréchaga.
El subdirector de Estudios y Relaciones Internacionales del Consorcio de Compensación de Seguros (CCS), Francisco Espejo Gil, en el curso del Simposium sobre Cambio Climático organizado por el Observatorio de Catástrofes de la Fundación Aon España, en Madrid, ha hecho explicado que la DANA del pasado septiembre ha costado en siniestros en Murcia y Alicante 455 millones de euros, las peores cifras en España, solo por detrás de las inundaciones del País Vasco de 1983, según ha informado la Fundación AON España.
Durante el Simposium, la Alta Comisionada para la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible del Gobierno de España, Cristina Gallach, ha señalado que las empresas españolas "deben aprovechar" la celebración en Madrid de la Cumbre del Clima "para relanzar sus estrategias medioambientales".
"El apoyo de la sociedad civil, que lideran universidades, organizaciones no gubernamentales y organizaciones sociales, entre otras, nos permitirá entrar el 1 de enero en la década de la sostenibilidad y la inclusión", ha apuntado Gallach, destacando la importancia de la investigación y la ciencia, además del "consenso generalizado en la gestión, para el cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible marcados por la Unión Europea".
Para Gallach, el liderazgo del sector privado "es clave" y la palabra sostenibilidad "está cada vez más presente en este sector". "Hay una mayor concienciación de anticipar e incorporar esta perspectiva de sostenibilidad en las políticas públicas", ha precisado.
"Por primera vez, tenemos una agenda internacional que une los grandes desafíos climáticos y la agenda de desarrollo económico y social", ha asegurado la Alta Comisionada, al tiempo que ha resaltado que "es clave la transversalidad y la rendición de cuentas, así como la garantía de seguridad y el respeto a los derechos humanos".