Después de once semanas de erupción, el volcán de La Palma sigue sin remitir. Muy al contrario, la lava sigue extendiéndose por la isla. La colada que surgió al oeste de Montaña Cogote y cae por el cantil en la zona de Las Hoyas derramándose sobre la isla baja ha arrasado 60 edificaciones en 36 horas, han avanzado el director del Pevolca, Miguel Ángel Morcuende, y la vulcanóloga del Instituto Geográfico Nacional (IGN), Carmen López.
López ha detallado que la erupción prosigue activa al oeste del cono principal, con la lava discurriendo por un tubo volcánico y varios jameos y se desplaza hacia el oeste sobre coladas anteriores y con un frente que ha desbordado hacia el suroeste sobre zonas no afectadas anteriormente, hasta llegar a la de Montaña Cogote. Se trata de coladas efímeras asociadas al sistema de alimentación superficial, muy fluidas, de alta temperatura y que avanzan rápidamente desgasificadas, pero apenas duran "algunas horas".
Se encuentran activos varios centros de emisión en la parte central y suroriental del cono principal, con pulsos esporádicos de actividad y emisión de cenizas, y que las grietas y fracturas observadas en días anteriores, en la parte superior del cono secundario, no han mostrado cambios o modificaciones relevantes en las últimas horas.
Ha dicho también que las grietas y facturas del cono secundario no presentan cambios relevantes y que el penacho de gases y cenizas se orienta al oeste, lo que favorece la navegación aérea, "con baja probabilidad" de que afecte al aeropuerto.
López ha advertido de que este martes se prevé una entrada de aire sahariano a la isla que puede incrementar las partículas PM10, que hoy son desfavorables en las estaciones de Los Llanos de Aridane y La Grama -en el resto razonablemente buenos y regulares-. En cuanto a la calidad del aire por dióxido de azufre (SO2) ha comentado que este martes se sitúa en niveles bueno o regular tras superar este lunes los valores límite en Puntagorda.
La sismicidad continúa baja a niveles intermedios, lo mismo que el tremor, que está en niveles bajos y con poca variabilidad y no hay tendencia de deformaciones salvo en una estación ubicada al sur que presenta una ligera deflación. La emisión de SO2 sigue alta pero con tendencia descendente y el dióxido de carbono hasta 6,2 veces por encima del valor promedio de niveles de fondo.
Morcuende ha comentado que al sur de la zona de exclusión se registraron este lunes valores altos en Puerto Naos y La Bombilla que obligaron a restringir el acceso, y que este martes prosiguen en la costa de La Bombilla.
En estos momentos hay 557 albergados en hoteles, uno más que este lunes, con 411 en el hotel de Fuencaliente, 71 en el hotel de Los Llanos de Aridane y 75 en otro de Los Cancajos, más 43 personas dependientes alojadas en centros sociosanitarios.
La superficie afectada se mantiene en 1.152 hectáreas, los deltas lávicos en 48,03 y la anchura entre coladas en 3.350 metros mientras que el Castro eleva las edificaciones destruidas a 1.562. En el caso de Copernicus se aumenta hasta 3.039, con 2.881 totalmente destruidas y 158 en riesgo.