César Román, el novio de Cristina López-Cerón --la joven de Viveiro (Lugo) que falleció en la explosión del Hotel Saratoga en La Habana--, se encuentra en la UCI del Hospital Calisto García de La Habana. Su pronóstico es reservado dentro de la gravedad.
As Pontes, el pueblo gallego en el que residían los dos jóvenes que fueron de vacaciones a Cuba, está, por un lado, de duelo por la muerte de Cristina y, por otra, con la angustia y esperanza de que se salve César, oriundo de la localidad.
Desde allí, la periodista Carmen López, de 'Cuatro al día', ha informado de que el joven se encuentra "sedado y con asistencia mecánica". "Su pronóstico es reservado dentro de la gravedad y eso a pesar de que los médicos han dicho estar satisfechos con la operación a la que tuvo que someterse porque no se presentaron complicaciones", ha dicho.
Ambos jóvenes, de 1992 él y 1993 ella, se encontraban en las inmediaciones del hotel cuando se produjo la explosión. Cristina López-Cerón falleció y su novio, César Román, resultó gravemente herido.
"En cuanto a Cristina, sabemos que el cónsul de España en la Habana ha procedido ya a la identificación de sus restos mortales y se ha determinado que la causa de su fallecimiento fue un politraumatismo severo. Tanto el Gobierno de España como la embajada en Cuba están acelerando los trámites para permitir la repatriación de su cuerpo esta próxima semana", ha informado López.
Por otro lado, según el nuevo balance de víctimas actualizado del domingo, al menos 30 personas han muerto y 84 han resultado heridas, de las cuales 24 permanecen hospitalizadas -- cuatro en estado crítico --, por la explosión en el Hotel Saratoga de La Habana.
Los fallecidos, según ha informado el Ministerio de Salud Cubano, son 16 hombres y 14 mujeres, entre ellas una embarazada y hay cuatro cuatro menores entre las víctimas mortales: uno tenía 10 años, otros dos tenían 15 años y el último, 17 años. De los hospitalizados, cuatro se encuentran en estado crítico, nueve graves y una decena bajo cuidados.