Agentes de la Guardia Civil se encuentra investigando desde el pasado mes de septiembre a un hombre de 43 años, de nacionalidad española, propietario de una explotación ganadera del municipio valenciano de Godelleta, tras detectar una serie de irregularidades en materia de sanidad animal y encontrar a 19 caballos en un estado de "extrema delgadez" con signos de malnutrición, mala higiene y falta de cuidados imprescindibles para su existencia, según ha informado la comandancia en un comunicado.
El estado de los animales era tal que según observaron los agentes, "de no acometer medidas urgentes, sobre todo de alimentación, la situación de muchos de ellos sería irreversible".
Tras inspeccionar la explotación ecuestre, la Guardia Civil requirió la colaboración de los servicios veterinarios oficiales de la Conselleria de Agricultura para que acudiese a las instalaciones y valorase el estado de los equinos.
La mayoría de los caballos desnutridos presentaban externamente signos de llevar meses con una alimentación pobre, con un pelaje sin brillo y estructura ósea fácil de visualizar a nivel de cruz y costillas, sin grasa en el cuello y los cuartos traseros con proyección de la estructura ósea.
Ante la sospecha de que hubiese caballos enterrados, tras descubrir restos de numerosos huesos de caballos y crines a ras de suelo de la finca hípica, la Guardia Civil y la Policía Local de Godelleta realizaron en noviembre una segunda inspección en una parcela colindante a la explotación del mismo terrero, en la que participaron veterinarios y operarios del Ayuntamiento de Godelleta.
Al realizar varios movimientos de tierras usando una retroexcavadora durante varias horas, debido al fuerte olor a putrefacción y a un metro y medio de profundidad, fueron encontrados enterrados restos, de al menos seis equinos muertos en avanzado estado de descomposición, y el investigado reconoció que procedían de su explotación.
Para intentar paliar los daños en los animales, la Guardia Civil solicitó la colaboración del Ayuntamiento de Godelleta, que ha adoptado medidas necesarias para preservar la vida de los animales y evitar que pereciesen, a través de un plan de recuperación de su condición corporal con un protocolo de alimentación, sanidad y estabulación valorado de forma individualizada de cada animal.
Como consecuencia, un vecino de la localidad de Godelleta ha sido acusado de un presunto delito relativo a la protección de la flora, fauna y animales domésticos por "maltrato animal continuado", ya que era el propietario y encargado de la custodia y mantenimiento de los caballos y presuntamente, no tomó las medidas necesarias para garantizar el bienestar de los animales.
La Guardia Civil en sus funciones de prevención, vigilancia y protección de la sanidad animal velando por el cumplimiento de las disposiciones que tiendan a la conservación de la naturaleza y al medio ambiente y cualquier otra relacionada con la naturaleza advierte, de que continúa observando para que "se cumplan las medidas mínimas de salubridad y alimentación de los equinos".
Esta Operación EQUORUM ha sido realizada por la Guardia Civil de Chiva conjuntamente con el Equipo Seprona de Benaguasil y la Policía Local de Godelleta, ha participado el Ayuntamiento de Godelleta y veterinarios especializados de la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y transición Ecológica de la Comunitat Valenciana.
Las diligencias instruidas han sido entregadas a la Fiscalía Provincial de Medio Ambiente de la Comunitat Valenciana y a los Juzgados de Primera Instancia e Instrucción de los de Requena.