Unas 8.000 personas han acudido durante el viernes por la noche y la madrugada de este sábado a un macrobotellón en el campus de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), en Cerdanyola del Vallès, Barcelona.
Según ha explicado el rector de la universidad, Javier Lafuente, en declaraciones a RAC1, desde las 06 horas de la madrugada están trabajando los equipos de limpieza, a los que aún "les quedan horas" por delante, y no será hasta el lunes que se conocerán los costes definitivos de los desperfectos, que asegura han sido menores.
Ante esta situación, Javier Lafuente ha remarcado que la universidad estudiará acciones para evitar futuros botellones en el campus, un espacio con muchos accesos abiertos "imposibles de controlar". Al parecer, la fiesta se convocó por redes sociales. Según el rector, la convocatoria era falsa, pero cientos de estudiantes la llevaron a cabo.
El botellón provocó el colapso en las carreteras que dan acceso al recinto y también el los Ferrocarriles de la Generalitat. Los Mossos no podían acceder porque necesitaban autorización de la Universidad, por lo que realizaron controles en los accesos, para que no accediera más gente.