El hijo de un empleado del Parque Nacional de Kruger en Sudáfrica, de 30 meses de edad, ha fallecido después de haber sido atacado por un leopardo, según han confirmado las autoridades oficiales. Los hechos ocurrieron en la noche del miércoles en el interior del recinto considerado el más importante del país africano y situado en el noroeste del territorio.
Tal y como indica el comunicado difundido, el menor de dos años y medio "falleció tras ser ingresado en un hospital local" al ser rescatado por sus familiares. Posteriormente, el animal responsable del ataque fue sacrificado "para eliminar el peligro de que otra persona sea víctima".
Por su parte, el director ejecutivo de Parques Nacionales de Sudáfrica, Fundisile Mketeni, ha expresado sus condolencias a la familia del fallecido. El representante ha dicho que "nunca es fácil perder a un ser querido, especialmente en unas circunstancias tan trágicas", señala Mketeni.
Una pérdida relacionada por el director del centro con "el riesgo con el que vivimos a diario mientras ayudamos a conservar nuestras especies en beneficio de todos. Espero que el alma del bebé descanse en la paz eterna", ha lamentado.
Las autoridades sudafricanas han resaltado que en parques como el de Kruger "los depredadores interactúan con turistas y trabajadores, lo que podría resultar en que especies como el leopardo se acostumbren a la gente y pierdan el miedo".
"Este cambio en el comportamiento natural puede llevar a incidentes desafortunados como este. Es un riesgo desafortunado que el personal sufre cuando tiene que vivir y trabajar en ambientes como el Parque Nacional de Kruger", ha concluido.