Carta de la madre de la niña con autismo de Sevilla: "Nuestros hijos deben de estar atendidos y valorados"

  • "Los colegios los hacen mejor y peor las personas que están dentro"

  • Las docentes implicadas declararán ante el juez el 27 de junio

Rocío, la madre de Valeria, la niña con autismo presuntamente vejada por varias profesoras del colegio de Dos Hermanas (Sevilla) en el que estudia ha dado las gracias por todos los apoyos recibidos. En una texto abierto publicado en Facebook ha querido defender el desempeño de muchos profesionales que trabajan con alumnos como su hija aunque ha reclamado más inversiones y coordinanción entre maestros, administración y padres.

El mensaje de esta nueva 'madre coraje', está dirigido especialmente a quienes les han apoyado dese que se conoció el caso, "He decidido escribir esta carta, principalmente, para dar gracias de corazón a todas las personas, medios de comunicación y demás que se han preocupado por este asunto tan desagradable para nosotros y por todo el apoyo recibido que ha sido muchísimo, inimaginable".

También ha destacado la excepcionalidad del caso al "recalcar una cosa muy importante, gracias a dios éstos son casos aislados; hay maravillosos profesionales que dedican su vida a enseñar, motivar y hacer crecer a estos niños, bajo presión, bajo pocos recursos, bajo mucha incomprensión... y a ellos también les doy gracias".

Lo sufrido por su hija Valeria no le impide destacar el esfuerzo que la comunidad educativa dedicada a educar y formar a menores con autismo, "me gustaría dejar claro que en ese colegio, Cervantes de Dos Hermanas, hay muy buenos profesionales. Yo también trabajo con niños, curiosamente tengo un centro de estudios donde la base del aprendizaje es la motivación hacia el alumno, y tengo muy claro que los colegios solo son paredes. Los hacen mejor y peor las personas que están dentro. Y por eso voy a seguir luchando, para que nunca, ninguna madre tenga ni sienta la necesidad de volver a meter una grabadora en la mochila de su hijo".

Rocío defiende que "los colegios deben de ser lugares, donde mínimo, cuando dejemos a nuestros hijos, estemos tranquilos y sepamos que van a estar atendidos y valorados", algo que contrasta con una realidad bien diferente, "nos encontramos a diario con pocas horas de pedagogía y logopedia, hay colegios que carecen de monitores y padres que tienen que dejar de trabajar para poder atenderlos si los llaman, no tenemos enfermeras y estamos

en nuestro caso siempre con miedo de que haya una llamada de que a nuestra hija le ha dado un ataque epiléptico".

Frente a esta realidad, Rocío reclama "vocación y formación" porque, asegura, "necesitamos coordinación entre profesionales, profesores fijos y cualificados para que nuestros hijos no sufran tantos cambios, orientadores que se pongan en el lugar de los padres, repeticiones de curso o cambios de modalidad donde se tome en cuenta a los padres, porque son unos cambios muy fuertes a los que muchos de nosotros no estamos preparados, con periodos de adaptación para no cortar de raíz los vínculos de nuestros hijos con sus compañeros, una integración digna, la cual mi hija nunca tuvo, programas de patio reales donde nuestros hijos se sientan uno más, donde se les enseñe a jugar, a relacionarse con iguales".

Tras lo sucedido, Rocío concluye que "a día de hoy es muy feliz", la quiere muchísima gente y ahora, todavía más. Ha sido capaz, sin poder hablar de ser "buque insignia" de muchos niños a partir de ahora, y su mamá está muy orgullosa de ella".

Y de todo ello saca una conclusión: "Hay que luchar porque no tengan que ser los niños los que se cambien de centro cuando estas cosas ocurren. Ella ha tenido que cambiar hasta de modalidad para poder trabajarle aspectos que nunca consiguió, hoy en día ya sé por qué. Espero que pueda volver a mi ansiada idea de integración e inclusión, pero cuando ésta sea real".

Las docentes, citadas a declarar

El agradecimiento de Rocío coincide con la admisión a trámite por parte del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Dos Hermanas (Sevilla) de la querella presentada por Valeria, la niña con autismo contra cuatro docentes del Colegio de Educación Infantil y Primaria (CEIP) 'Cervantes' de la localidad nazarena por un supuesto trato degradante a esa menor y ha ordenado iniciar diligencias y que las denunciadas declaren el día 27 de junio.

Según han informado el abogado representante de la familia de la menor, Javier Jaenes, a Europa Press, el juzgado ha ordenado que se inicien actuaciones con el objeto de esclarecer la demanda presentada.

De esta manera, el día 26 de junio, los padres de la menor, que decidieron instalar una grabadora en la mochila de la pequeña ante los "fundados temores" de que en el centro público al que acudía la menor se pudiera estar produciendo alguna situación irregular, están llamados a declarar para ratificar su denuncia, y al día siguiente, declararán las docentes denunciadas.