La Consejería de Educación del Principado de Asturias ha decidido retrasar el inicio de curso al 22 de septiembre para los alumnos de Infantil y Primaria y para el 28 de septiembre el inicio de la ESO y Bachiller debido a que se realizarán pruebas PCR a todo el profesorado.
Primero fue Madrid y ahora Asturias ha decidido retrasar el comienzo del curso 2020/21 por la pandemia de coronavirus. Primaria e Infantil empezarán casi dos semanas más tarde, el 22 de septiembre, y Secundaria y Bachillerato el 28 de septiembre.
Los alumnos de Formación Profesional comenzarán el 30 de septiembre y los de idiomas y educación de personas adultas el 5 de octubre.
El anuncio llega después de la reunión entre el Gobierno central y las CCAA en el que aprobaron un acuerdo con 29 medidas para la vuelta al cole segura. Entre ellas, el uso de mascarillas obligatorias desde los seis años, lavado de manos constante y toma de temperatura.
La consejera del ramo, Carmen Suárez, ha explicado que la medida responde al objetivo de comenzar el curso con garantías de sanidad para alumnado y personal docente, tanto en la educación pública como en la concertada.
También ha pesado en la decisión del Ejecutivo la intención de esperar a ver cómo evoluciona la pandemia en los primeros quince días de septiembre, cuando se espera que ya se conozcan los datos de contagios correspondientes al fin de la época estival.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, Suárez ha anunciado que la contratación de 860 nuevos profesores también retrasará la vuelta a las aulas. Todas las medidas adoptadas por el Ejecutivo en relación a la vuelta a las aulas suponen un coste extra de 30 millones de euros para las arcas autonómicas.
El Principado ha acordado que la docencia sea presencial desde Infantil hasta segundo de la ESO y semi presencial a partir de 3º y hasta segundo de Bachiller. Para garantizar la presencialidad en el primer bloque, se harán grupos más pequeños y se formarán "grupos estables de convivencia", que también compartirán comedor si son usuarios.
A partir de tercero de la ESO cada clase se dividirá en dos grupos de alumnos, que acudirán en días alternos a las aulas. Para ello Educación proporcionará el material tecnológico necesario, a fin de que "haya relación" entre lo que los alumnos trabajen en sus casas y en el aula.
A fin de prevenir contagios, la distancia de seguridad, el lavado de manos, la ventilación y el uso generalizado de mascarilla a partir de los 6 años formarán parte de la nueva realidad de colegios e institutos.