La situación actual de la pandemia de coronavirus y el clima de confrontación entre la clase política en España tienen muy enfadados a muchos españoles. Por eso, seguramente la mayoría de ellos se sentirán identificados con el discurso que dio el popular cocinero Karlos Arguiñano.
Según recoge 20minutos, el chef vasco realizó algunas reflexiones mientras cocinaba: "Sobresaliente le van a dar a nuestros gobernantes. Nos tienen locos, ¿verdad?". "Hay una cosa que no entiendo: Yo por ejemplo, guipuzcoano, no puedo ir a La Rioja. Que está aquí al lado, pegados. Fíjate si me gusta ir a La Rioja e ir a comer a 'Alameda', en Fuenmayor. Tengo unas ganas... pues yo no puedo ir", afirmó Arguiñano.
"Y sin embargo los franceses vienen como locos a España, que entran por Barajas, parece ser, la mayoría de ellos. ¿Eso cómo es?. ¿Me lo podéis explicar?. Que nosotros no podamos ir a saludar a nuestros abuelos, a nuestros mayores, con todos los cuidados y que los franceses vengan, se mamen como osos, porque se maman como osos, los hemos visto, porque lo están dando en televisión todo el día", exclamó el cocinero.
Arguiñano replicó con un peculiar acento francés lo que dicen esos turistas galos cuando aterrizan en España: "Aquí hay juerga, aquí mucho bonito, todo juerga y hay fiesta y venimos aquí a disfrutar, todos estamos muy contentos de venir a España", exclamó el de Beasain. "A mamaros como osos, con la mascarilla aquí (dijo señalándose la barbilla), enseñando el culo a las cámaras... ¿Qué tiene que venir, Macron? ¿Los de aquí qué, no van a ponerse a mandar?", se preguntó.
"Vamos a controlar un poquito el país porque bastante tienen los políticos con sus rollos, que son insufribles. Estamos los españoles hasta el moño de los políticos. Hasta el moño. No hay un moño solo, parece ser que moños llevan casi todos, porque se comportan como unos 'moñosos'. ¡Qué 'gorileros' son! ¡Qué barbaridad, qué ganas de estar sentados en unos asientos!", se quejó el cocinero.
"Es que mientras están discutiendo no están gobernando. Y tenemos tantos... Si habría (sic) 100 buenos... pero tenemos 10.000 malos. 100 buenos nos bastarían para que España fuera un país líder, pero claro, con 1.000 malos, somos el hazmerreír", concluyó Arguiñano.