Se la conoce con el nombre de Loxoceles rufescens y es la hermana mediterránea de la peligrosa araña violinista latinoamericana, que ha desatado el pánico en Alicante después de que cuatro personas de Elda y Sax hayan sufrido varias picaduras de este ejemplar. Entre los afectados, se encuentra un vecino de Elda, que tuvo que ser ingresado en el hospital por la gravedad de su estado.
Algunos vecinos de Sax han tenido incluso que abandonar sus casas aunque por el momento Sanidad descarta que se trate de una plaga, los vecinos de Sax se sienten intranquilos. Frente a esta situación, los expertos piden acudir inmediatamente al médico en caso de picadura y mantener la calma si nos encontramos con esta solitaria y escurridiza araña, que incrementa su actividad en las noches de verano.
La araña violinista puede medir hasta 20 milímetros y su nombre proviene de la mancha que posee en el lado dorsal del tórax, muy similar a la forma de un violín. Es de color negro, pardo o ceniza, dependiendo del hábitat en el que se encuentre, y tiene tres pares de ojos, dos menos de los habituales en los arácnidos. Sus telarañas son pegajosas y de color blanquecino. Difícilmente se verán colgadas de árboles o paredes.
Esta especie es principalmente nocturna, y permanece especialmente activa en las noches calurosas de verano, mientras que por el día se oculta en rincones oscuros y lugares polvorientos, como librerías, armarios o la parte trasera de los cuadros. Cuando es sorprendida, reacciona con mucha rapidez y puede correr velozmente en busca de refugio, escabulléndose por diminutas rendijas e incluso llegando a saltar 10 centímetros de altura.