El Chicle no se ha levantado de su rincón para hacer el alegato final. No ha dicho que es inocente pero ha pedido perdón. Un perdón que no salió de su boca en el primer día de juicio pero que sí pidió hace meses cuando fue juzgado por el intento de agresión sexual a la chica de Boiro. El detonante de su detención por el crimen de Diana. El hilo conductor de los dos casos. Entonces no pronunció el nombre de Diana. Se refirió a ella como la chica de Madrid y habló quejoso pero enigmático; no supimos entender lo que quería decir y ahora en el juicio hemos seguido sin saber lo que pretendía explicar sobre el caso Diana cuando dijo “que la familia no crea todo lo que escucha”. Pasadas todas las sesiones de juicio, no quiere añadir nada. Ya ha dicho bastante su defensa. Su abogada ha seguido un guion de titulares muy rimbombantes con un tono áspero, como ha sido prácticamente todo el tiempo. Parecía que reñía, estaba de mal humor. Hoy ha reconocido que se sentía frustrada. Pero no porque las sesiones le hayan ido dando reveses. Ella considera que el Chicle no ha tenido un juicio justo.
“Es horrible, un dolor infinito, pero el dolor permanente no justifica la prisión permanente por venganza”. Lo ha repetido tres veces. “Aquí se ha montado una película de terror. Él no quería provocar dolor a la familia al meterla en el pozo. ¿Qué iba a hacer?, ¿Matarse? ¿Darse un tiro?”. “No sé si se han desinfectado” ha espetado al jurado. Todos los medios de comunicación le han tratado como un monstruo”. “Es un ser humano" ha dicho señalándolo. Eso sí que es puro teatro. La abogada ha culpado de nuevo a los medios de comunicación como si en nuestras crónicas destiláramos odio y rencor y no hechos, los que se han ido reproduciendo en el juicio, público. Lo hemos visto todos.
Se ha lamentado por ser una abogada de oficio a la que el Chicle, “que no tiene un duro”, no paga, dice. Ha sido capaz de llamar incompetentes a los investigadores de la UCO, reírse de los informes de posicionamientos del GATO que situaban a Diana en la calle por la que andaba y no en la que decía el Chicle. Ese informe fue el principio de la caída de la versión del Chicle. Si no le sorprendió Diana robando gasolina en la calle de los feriantes, entonces fue a cazarla, la acechó, persiguió y raptó, como dicen las acusaciones. Si ya no fue un homicidio accidental y la cazó tuvo que ser para algo. Para agredirla sexualmente creen fiscal y acusación particular. Y si la mató, fue para tapar la agresión.
“Aquí lo que hay es una obsesión por incriminar al Chicle por violación y asesinato”. “No ha sido un procedimiento justo y se ha retrocedido a la justicia medieval. Hubo un proceso inquisitivo. La carga de la prueba pesó sobre mi espalda”. Así se expresaba la abogada del Chicle. “No hay ninguna prueba de que José Enrique hubiera violado y asesinado con una brida a Diana”. “Es la Investigación menos rigurosa que he visto en mi vida. Son unos incompetentes y los forenses manipularon”. “Están acomodando los hechos a la versión y lo que hay que hacer, es al revés”.
Aunque parezca mentira la abogada habla de la brida, de que no tenía ADN a pesar de que quedó claro que 500 días lavándose lo hacía imposible. También ha hablado del tamaño, de la imposibilidad de que esa brida rodeara el cuello de Diana, pero lo ha explicado con tanta crudeza que ha tenido que decir que lo siente. La realidad es que los forenses explicaron por qué esa brida había estado en el cuello, y por qué tuvieron que recogerla de la cabeza. No viene al caso, de nuevo, tanto dolor.
Con todo el cuidado que tuvieron los forenses, los buceadores y cuantos declararon, para ser precisos pero sensibles, hoy ha llamado la atención la abogada del Chicle, de nuevo. “¿Estamos en una sala de justicia o en un circo? Todo vale para castigar al monstruo. ¿Les gustaría que a sus hijos les pasara eso?”. La letrada ha negado que el Chicle violara a la hermana gemela de su mujer recordando el mal trago que hizo pasar a toda la familia durante el juicio. Un caso que esta ya reabierto pero ella lo ha resuelto. Y ha negado la violación de Diana poniendo en duda que “una violación pueda existir sin violencia”. Si el movimiento feminista se parara un momento a escuchar y ver estas declaraciones… Para justificar a su cliente ha utilizado expresiones como “no es lo mismo un ligón baboso que un depredador sexual”. La defensa niega todas las pruebas que presentan las acusaciones para probar la agresión sexual, y el asesinato. Todas.
El juez ha explicado el veredicto a los jurados. “Tienen que tomar decisión con arreglo a su independencia. Que no les influya nada del exterior. Tienen que usar sentido común”. Los nueve jurados estarán en una parte del edificio. Luego descansarán en un alojamiento Deben elegir un portavoz. Lo que discutan es secreto. Solo deben comunicar un resultado. Deliberarán y luego tomarán decisión. El juez les ha dicho que es importante que agoten la deliberación. “Surgen matices y eso hace que mejore la calidad del resultado”. Lo más difícil es que deben dar razones para justificar sus decisiones. Deben dar breves razones que hagan entender.
Asesinato; el Ministerio Fiscal ha pedido que concurre ensañamiento. Causando a la víctima padecimientos innecesarios. Deliberadamente. Pueden ser no físicos. La jurisprudencia dice "lujo de males". Actos que son un exceso. Para matar no se necesitan 50 cuchilladas.
Alevosía; aniquilar las posibilidades de la defensa.
Detención ilegal; privar de libertad a una persona.
Homicidio imprudente; idea de la falta de previsión. Sin tener intención de hacer algo.
Homicidio por dolo eventual; aun sabiendo que puede provocar un resultado, sigue haciéndolo. No quiere causar el resultado.
Agravante de género; motivos discriminatorios por razón de sexo, "machismo". Ánimo de someter a la mujer, dominar, sentirse superior.
Confesión (propuesta por la defensa); circunstancias de atenuantes por analogía, sucede ya avanzado el procedimiento. Aporta una información importante para la justicia. Tienen que valorar cual es la importancia de esa confesión para que se puedan juzgar los hechos. Abuín reveló donde estaba el cuerpo pero igual se hubiera llegado a la nave sin su confesión (como decía la GC).
Delito de violación; penetración vaginal o cualquier otro acto de contenido sexual con intimidación y uso de la fuerza.
Sobre la presunción de inocencia les ha dado otra clase específica. Cada uno es dueño de su voto, debe existir una prueba más allá de una duda razonable. Cuando consideren que hay una duda razonable su voto debe ser favorable al acusado. Lo dice la ley. Así lo ha dicho el magistrado. Nada en la prueba es un dogma de fe. Y sobre los indicios, partiendo de un hecho nos lleva a una deducción. Esos indicios entre si deben "fortalecerse". La consecuencia debe ser racional.
Lo que rige es la sana crítica. Deben tener en cuenta la profesionalidad de los peritos, su buena fe. Las características técnicas del dictamen, la firmeza de los criterios, si son fiables o no, antecedentes de los informes, resultado de los peritajes... Que exista un consenso en cuanto a la validez de esa teoría. Cuando les ha dicho eso el juez ha tocado en hueso. La discusión entorno a si Diana tenía edema o no de violación fue clave. Dos eminencias, dos forenses, discutieron en la sala. No se pusieron de acuerdo. Pero el juez ha recordado que hay elementos probatorios que insisten en una pauta de comportamiento del acusado. El Derecho español es proteccionista, les ha dicho. Lo que se hizo en otros momentos previos no puede valer para demostrar actuaciones en otros casos. Se refería al caso de Boiro. Abuín está condenado por intento de agresión sexual. "La torre se tiene que sostener sola, la personalidad del acusado es un elemento más”. En cuanto al "modus operandi" ocurre lo mismo explicaba. “No es suficiente para atribuirle el delito”. La probabilidad lógica no puede fundamentarse solo en una probabilidad estadística. Aquí el juez les ha dicho sutilmente que el teorema de Bayes aplicado por la acusación para probar agresión sexual, no es científico.