El narcotráfico es una práctica que cada vez tiene un peso mayor en España, algo que preocupa no solo a las autoridades sino a la sociedad entera, debido a la alta peligrosidad que tienen muchas operaciones, por la que ya han perdido la vida tanto agentes como narcotraficantes.

"En cualquier zona fronteriza del mundo ha habido narcotráfico y siempre lo va a haber, pero es que aquí tenemos la cercanidad de África, Gibraltar y una frontera que ni siquiera es una frontera entre dos continentes, sino que es un frontera mundial", ha explicado Lisardo Capote, jefe de vigilancia aduanera en Algeciras para 'Informativos Telecinco'.

"Nosotros vamos seleccionando los contenedores que queremos inspeccionar. A esos 7.000 contenedores que nos llegan al día por vía marítima, hay que añadir las cargas que nos llegan por vía camión", añade. Realizar su trabajo no es una tarea fácil, la intuición es un factor clave para determinar dónde puede estar el cargamento de droga que quieren introducir nuestro país.

Por ello, ante la pregunta de cuál es el indicador que hace saltar las alarmas entre estos trabajadores, ha contestado que se "dividen en empresas, origen y destino del cargamento o la propia mercancía en sí. Ahora hay una tendencia que se está utilizando con mayor frecuencia para la ocultación de droga". Hay diferentes grados del narcotráfico, dependiendo del cargamento "normalmente empiezan por el tabaco. De esto se suele encargar trata un chaval al que se le da un teléfono con las llamadas restringidas y con el que simplemente tiene que llamar a alguien para avisar de que hay alguna actividad de control por parte de las autoridades", añade.

El trabajo de narcotraficante suele ser muy llamativo para los jóvenes porque se puede pagar "varios cientos de euros por una noche. Si tienes 14 años eres un monstruo, pero si con 24 años sigues teniendo este papel, eres una porquería. Lo que la mayoría de ellos quieren es tocar mercancía. Entonces es cuando pasas a ser la 'colla', es decir, quien coge los fardos y los carga al vehículo, aquí ya estamos hablando de miles de euros por esta labor. Si hablamos del conductor hablamos de algo más. Si llegas a ser piloto de una embarcación, estamos hablando de decenas de miles de euros", cuenta.

"Esta reputación se gana con violencia. Les enseñan que, por muy presionados que vayan, el cargamento hay que conservarlo hasta los últimos extremos, y si esos extremos implica pasar por encima de un agente de la autoridad, lo hacen. Eso antes no existía. Ellos cuentan con un factor fundamental, por dinero no va a ser, porque como les pidas, ellos tienen dinero.", cuenta.

Para terminar, explica que una de las peores experiencias que ha vivido en su trabajo tiene que ver cuando una persona en la que se confía, estaba también metido en estas redes de narcotráfico: "Eso y la pérdida de una vida es lo peor. Yo he vivido ambas, he perdido a compañeros y he tenido compañeros con casos de corrupción", termina.

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