Todo dueño de perro puede empatizar con la desesperación que sienten Mari Carmen y Víctor, los dueños de una galga llamada Mota a la que llevan buscando desde hace 36 días. Están convencidos de que, lo que comenzó siendo un extravío en los alrededores de su vivienda, en la zona de Crevillente - casi en la frontera con Elche, Alicante - ha terminado con el robo deliberado de su mascota, de 9 años de edad.
Dos semanas antes del incidente, Mota se había escapado de casa siguiendo su olfato de cazadora hasta un descampado "en el que hay conejos". Afortunadamente, ella misma volvió a la casa en la que convive desde hace cinco años con otra galga, llamada Susi, a las que adoptaron juntas, y dos perros salchichas con los que formaba una sólida manada. Por eso, el día en que desapareció, sus dueños pensaron que el episodio tendría el mismo desenlace.
Sin embargo, al ver que la galga había salido de nuevo de casa y que, al pasar las horas, no aparecía, comenzaron a preocuparse. Preguntaron a los vecinos y desde el día siguiente, pusieron avisos en sus redes sociales y contactos de teléfono para saber si alguien la había visto. Efectivamente, así había sido: "A los dos días me avisaron de que la habían visto en el Barrio de la Salud y y el Ángel y cuando fui a buscarla, un señor que había en medio del campo, porque todo aquello colinda con la sierra, me dijo que diera a la perra por perdida".
Es ahí cuando empezó a sospechar que alguien la había "encontrado y se la había quedado", pues no sería éste el primer robo de galgo que se registra en la zona (ni en el resto de España): "Los galgos son muy buenos para la caza y para las carreras. Un comercial nos dijo también que la habían visto en el polígono de Albatera. Y creemos que la soltaron por allí para ver si se perdía o que se la han llevado en coche porque hemos peinado toda la sierra, la hemos buscado con la furgoneta, hasta llamándola con un altavoz. Y nada. No es normal que no la encontremos. Es descorazonador", dice Mari Carmen en una entrevista con la que pretende que la imagen de su perra llegue hasta el último rincón.
La galga tiene chip, su desaparición está denunciada y sus dueños cuentan con la total colaboración de la Guardia Civil de Crevillente y el municipio de Elche, quienes también la buscan activamente. "Nos mandarán una patrulla donde sea necesario. Nosotros no vamos a parar de buscar a Mota hasta que la encontremos", ha dicho, pues su máxima intención es que su mascota vuelva a su hogar, donde es una perra inmensamente querida, cuidada y feliz.