Hay quien lo llama 'happycracia'. Se trata de esa necesidad extrema por alcanzar la felicidad. En tiempos de exposición en redes sociales, mucha gente busca a toda costa vivir momentos excitantes, donde parece que la tranquilidad o la apatía no tienen ningún hueco. No son pocos los negocios que han florecido al calor de esa búsqueda constante de la felicidad.
Bienvenidos a la 'happycracia', una tiranía que se nos impone desde que nacemos hasta el final de nuestros días: "Es la obligación de siempre estar feliz", explica la psicóloga Nuria Fernández. Nos empujan a perseguir ese concepto tan amplificado por las redes sociales: "Si estamos en un entorno donde constantemente te están diciendo que están saliendo de viaje, que están comiendo en sitios estupendos, donde todo el mundo es feliz...", precisa Nacho Morón, decano de psicología en la Universidad de Granada.
Y aquí empieza el negocio que para muchos ya es un fraude: "La industria económica que hay detrás de esta 'happycracia' es enorme. Desde libros a películas". También hay tazas que nos hacen beber la felicidad de un trago, o incluso aplicaciones como 'Happyfy', que nos promete alcanzar la tan ansiada felicidad en cuatro meses.
"Puede generar unas expectativas que no son realistas, desembocando en trastornos, depresión, sobre todo frustraciones, e incluso desenlaces peores", subraya Morón. Empresas y gobiernos se han sumado al carro, encargando rankings y contratando coaches emocionales para que la búsqueda de la felicidad no nos haga infelices.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento