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La Guardia Civil investiga a una mujer tras encontrar el cuerpo sin vida de un bebé de ocho meses de gestación en un contenedor y reconocer su hijo menor que lo había tirado a la basura con la ayuda de su madre en el municipio toledano de Mocejón.
La mujer se habría presentado el pasado 18 de enero en el hospital universitario de Toledo, a 20 kilómetros de su vivienda, reclamando atención por un sangrado que ella atribuía a un desajuste menstrual.
La inspección por parte de los sanitarios ginecológicos concluyó que la mujer acababa de dar a luz por lo que le preguntaron por el recién nacido, algo que ella negó, asegurando además que no había estado embarazada.
Ante las evidencias médicas, los sanitarios denunciaron el hecho ante las autoridades lo que llevó a una actuación de la Guardia Civil que se desplazó hasta la zona.
Una vez en la vivienda, los agentes recabaron el testimonio del hijo menor de la mujer que reconoció que su madre había dado a luz y que con su ayuda lo habían arrojado a un contenedor donde fue localizado por los agentes.
Mientras se concluye la autopsia al bebé y se determinan las causas de la muerte, la mujer permanece en su vivienda sin estar detenida.
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