La iglesia de Santa María la Mayor de Roma: dónde está y por qué el Papa quiere ser enterrado allí

  • Francisco no es el primer Papa que no opta por ser enterrado en el Vaticano

  • El Pontífice elige la iglesia de Santa María la Mayor de la que es muy devoto

  • Solo la mitad de los Papas permanecen enterrados en la iglesia del Vaticano

El Papa no quiere ser enterrado en el Vaticano. Ha elegido la basílica de Santa María Mayor de Roma, concretamente, una capilla en la nave izquierda de templo. Él mismo lo ha confesado en una entrevista en una televisión mexicana.

Todos los Papas de los siglos XX y XXI fueron enterrados en un primer momento en el Vaticano, el último Benedicto XVI, que fue sepultado el 5 de enero de este año en la misma tumba que ocuparon Juan XXIII y Juan Pablo II.

Por qué la iglesia de Santa María la Mayor

Pero no todos los Papas están allí. Los restos de León XIII se trasladaron en 1924 a la basílica de San Juan de Letrán en reconocimiento a su vínculo con este templo, según informa Alfa & Omega.

Es por eso que Francisco ha elegido la basílica de Santa María Mayor de Roma. Tiene una especial relación con ese templo, en el que ha estado 115 veces. Lo visita siempre antes de partir en un viaje.

“Es mi gran devoción. Ya antes, ya cuando venía, siempre iba ahí el domingo en la mañana que estaba en Roma, me iba un rato allí. Sí, hay una ligazón muy grande”, ha explicado Francisco en una entrevista en el canal mexicano N+.

El Papa ha elegido incluso el lugar dentro de la basílica de Santa María Mayor de Roma donde se situará su tumba. En una capilla de una nave izquierda.

Ha asegurado el Papa que lo tiene todo previsto y que todo está organizado de la mano del arzobispo italiano Diego Giovanni Ravelli, Maestro de las Ceremonias Litúrgicas Pontificias. El rito “se ha simplificado bastante”, ha dicho un papa que siempre se ha mostrado sencillo y cercano.

El Papa Francisco no rompe con una tradición inamovible. Sobre todo teniendo. En el Vaticano solo están enterrados 92 de los 264 pontífices de la historia. En tiempos lejanos los papas solían elegir como lugar de enterramiento alguna iglesia de Roma, como ha hecho Jorge Mario Bergoglio.