El caso Luis Lorenzo se encuentra más cerca que nunca del archivo. La jueza que investiga la muerte de la tía política del actor Luis Lorenzo se encuentra a la espera de una ampliación del último informe forense, que determinó que "no existen datos objetivos" de que la víctima sufriese una "intoxicación aguda por cadmio o manganeso", y que de corroborarlo podría significar el archivo definitivo del caso, han confirmado a EFE fuentes jurídicas.
Luis Lorenzo afirmaba a Así es la Vida de Telecinco que "por fin anoche he podido dormir, mucho tiempo después de sufrir un escarnio, un aquelarre, una brutalidad por parte del acorralamiento mediático y una investigación que ha hecho un daño irreparable a esta familia”, ha comenzado el actor. Luis Lorenzo destacaba que el informe forense “descarta que haya habido ningún tipo de intoxicación, maltrato ni comportamiento anómalo. En todo momento ha habido un seguimiento y trato adecuado”. “Me ha dolido la ineficacia de la justicia, el no respetar la presunción de inocencia, el juicio paralelo, esas miradas de soslayo, la hipocresía. Aprendamos a no juzgar a nadie su no queremos ser juzgados”, señalaba.
Pero lo peor de todo, según ha explicado, han sido sus hijos: “Les han metido a ellos en medio. Eso no se olvida”, confesaba emocionado.
Con esta diligencia, solicitada el pasado julio, la magistrada pretende ampliar y ratificar la información acerca de las causas de la muerte de María Isabel Suárez, de 85 años, y decidir si finalmente decreta el sobreseimiento de la causa, como solicitó la defensa de Lorenzo y su pareja y sobrina de la fallecida, Arancha Suárez Palomino, también investigada. Por desavenencias con el anterior letrado, la pareja ha designado a Juan Manuel Medina como nuevo abogado defensor, aunque el cambio no implica que vayan a dejar de insistir en el archivo de la investigación.
En el momento de su muerte, el 28 de julio de 2021, la anciana vivía con Suárez Palomino y Luis Lorenzo y cuando murió algunos familiares de la fallecida sospecharon que podría tratarse de una muerte no natural y solicitaron una autopsia que determinó que se trató de una muerte de etiología homicida, por envenenamiento con cadmio y manganeso.
El 29 de junio, el magistrado Ignacio Arconada, por entonces a cargo de forma temporal del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 9 de Arganda del Rey (Madrid), recibió un informe conjunto de dos forenses sobre la autopsia que se hizo a la víctima tras su muerte. Este reflejó que "no existen datos objetivos de intoxicación aguda por cadmio o manganeso" ya que no hallaron dichos metales en las vías respiratorias ni en los órganos.
"La médico forense que realizó la autopsia llegó a la conclusión de intoxicación aguda por metales pesados teniendo en cuenta únicamente los resultados obtenidos de la muestra de sangre, cuyos valores de referencia han sido establecidos para adultos vivos, ya que en la actualidad los rangos de referencia post mortem establecidos son limitados e inexistentes para el cadmio y el manganeso", añade el documento, al que tuvo acceso EFE.
Explican los peritos que, como expuso un informe del hospital Gómez Ulla, se pudo tratar de un trasvase post mortem de estos metales pesados, pese a que la Guardia Civil mantiene que los dos investigados causaron la muerte a la anciana para quedarse con su herencia y patrimonio. Y destacan que tras la muerte solo se analizaron dos órganos, "no pudiendo determinarse la causa exacta del fallecimiento debido a los escasos estudios realizados"