Un tren ha arrollado a siete jovenes que estaban en las vías de los Rodalies a la altura de Montmeló. Cuatro han muerto. Los vecinos que viven cerca de las vías no comprenden porque los chicos, que iban al festival de música, fueran por las vías. La zona “no tiene salida”, ha dicho un hombre. Otro ha explicado que su mujer fue testigo directo del atropello moral: “Los vio andando por la vía, vino el tren y se los llevó”.
“Tiraron un vaso de bebida que dio en mi casa, mi mujer salió al escuchar el ruido y los vio andando por la vía, vino el tren y se los llevó”, ha contado José Ruiz, un vecino que vive junto a las vías del tren.
“Hace dos semanas había aquí dos niños jugando… No lo veo lógico”, ha señalado el vecino muy preocupado.
“Ayer por la tarde vimos a gente pasando por aquí y nos extrañó porque esto no tiene salida”, ha comentado muy sorprendido un anciano que vive en la zona de Montmeló próxima a las vías.
“Nunca habíamos tenido un incidente de esta magnitud, ni una tragedia similar en Montmeló, ha señalado el alcalde de Montmeló, Pere Rodríguez. “Es inexplicable. El lugar al que accedieron a las vías no es ni natural ni obvio, ni conduce a ningún lugar”.
El acceso al festival estaba indicado y había un informador, ha asegurado Pere Rodríguez, que cree que los chicos decidieron acortar camino y se toparon con las vías del tren en una zona “totalmente a oscuras y sin señalización con tal mala suerte que en ese momento pasó el convoy les arrolló. A 50 metros hay un puente. Parece evidente que no sabían por dónde iban”. No obstante, el alcalde ha pedido esperar a la investigación de los Mossos.