La periodista y humorista madrileña Nerea Pérez de las Heras, de 41 años, ha hecho público este lunes en redes sociales que sufrió un grave accidente en el mar este verano, el cual acabó con la amputación de parte de una de sus piernas. Así lo ha explicado desde Instagram la también autora del monólogo teatral Feminismo para torpes.
"El domingo 23 de julio, mientras el país votaba, yo tuve un accidente en el mar que me hará celebrar mi cumpleaños dos veces al año", ha arrancado explicando la humorista, que ha compartido imágenes de ella junto a su novia desde el hospital, así como un vídeo postrada en la cama en el que sus piernas están tapadas.
Nerea sufrió un accidente al cortarse con una hélice mientras disfrutaba de un día en lancha en Cala Turqueta, en Mallorca: "Ana y Carmen me sacaron del agua -que era una sopa roja alrededor de nosotras-, yo me hice un torniquete, pedí agua, informé de mi grupo sanguíneo, Arden llamó a una ambulancia...".
"No hemos estado más espabiladas en la vida. Me mantuve 'Alerta, consciente, orientada', como dice el informe médico, durante horas, hasta el primer quirófano. 'Alerta, consciente, orientada' para qué más bio la verdad", ha agregado la humorista sobre lo ocurrido.
Nerea afirma que le salvaron "el pellejo en el hospital Mateu Orfila". De allí la trasladaron en avioneta hasta el de Son Espases de Mallorca, donde pasó seis días con tratamiento intenso "en un box de la unidad de reanimación". "Tres cirugías de urgencia y un bypass fallido después me amputaron parte de la pierna derecha", ha detallado la humorista.
Y la periodista también ha querido explicar su ausencia en redes: "Fue el día 28, me acabo de dar cuenta de que hoy hace un mes que empecé esta nueva vida cyborg. Aunque no dije nada por aquí, no ha sido un mes de silencio, todo lo contrario, ha sido un mes de pitidos de máquinas que me mantenían viva".
La humorista dice que ha tenido un mes "de pitidos de mensajes y llamadas", "de hablar y hablar y escuchar y escuchar a doctoras, amigas, auxiliares, hermanas, hermanos decirme las cosas más bonitas y más importantes de mi vida". "De escuchar a Ana, que no ha dejado de sacarme del agua constantemente cada minuto desde el día 23. Ana cuidándome con una fuerza y una alegría nunca vistas. Mi amor", ha relatado.
Nerea asegura que sale de esta situación "aullando" que viva la sanidad pública española, que viva la vida, que viva su novia espartana, valkiria de hospital, sus hermanos y hermanas. "Que bendito mi instinto de supervivencia de cucaracha indestructible, que bendita mi suerte por tener una red que esta vez no está a mi alrededor sino justo debajo de mí, floreciendo, brillando, sosteniendo mi cuerpo machacado. Que, pies, para que os quiero si tengo alas para volar", ha sentenciado. Todos esperan que continúe con su recuperación y la sonrisa de siempre.