La familia de Daniel Sancho, en prisión provisional en Tailandia por el asesinato del colombiano Edwin Arrieta, aseguró este jueves en un comunicado que ha enviado a la agencia de noticias 'EFE' que siente "mucho el fallecimiento de Edwin", y reiteró su intención de no hacer más declaraciones "para respetar el momento tan doloroso que estamos viviendo ambas familias".
"Agradecemos el interés de la prensa, pero no podemos hacer declaraciones en este momento para no inmiscuirnos en la investigación y para respetar el momento tan doloroso que estamos viviendo ambas familias en esta terrible situación que nos ha tocado vivir", añade el comunicado leído a EFE por Fernando Oca, director del despacho de abogados que representa a Sancho. "Sentimos mucho el fallecimiento de Edwin y acompañamos en el sentimiento a su familia", añade el texto de la familia de Daniel Sancho, hijo del actor español Rodolfo Sancho y nieto del también actor Félix Ángel Sancho Gracia.
Este comunicado llega cuatro días después de que el actor Rodolfo Sancho pidiese el "máximo respeto" para su hijo, Daniel Sancho y para toda la familia, "en estos momentos delicados y de máxima confusión".
En un breve comunicado, el actor y la familia del joven rogaban "a los medios de comunicación que se abstengan de emitir cualquier juicio precipitado" ante los últimos acontecimientos.
También pedían que no se lancen informaciones "que pudieran interferir en el desarrollo de la Justicia y en el correcto procedimiento de la investigación, así como cualquier acción diplomática que pudiera estar en curso".
El juez ha decidido que, finalmente, Daniel Sancho va a ser juzgado en Tailandia por asesinato premeditado. Un delito por el que le puede caer la pena de muerte o la cadena perpetua. La Policía del país asegura tener ya los indicios suficientes para que el juez comience la instrucción, que podría prolongarse durante cuatro o seis meses. Durante todo ese tiempo Sancho permanecería en la cárcel de Koh Samui donde ingresó el lunes.
Las condiciones de vida en la pequeña prisión de Koh Samui no son ni de lejos las peores del precario sistema penitenciario tailandés. Apenas 700 presos que están acusados de delitos menores, muchos de ellos extranjeros, acompañan a Daniel Sancho.
Los propios funcionarios de la prisión confirmaban a 'El Programa del Verano' que el joven de 29 años "está estresado, no está contento, pero se está adaptando a la vida en prisión".
Como todos los internos, Sancho viste un uniforme azul y le han cortado el pelo. Comparte cuarentena con otros cinco reclusos en la enfermería donde duerme en un colchón en el suelo y también ha pedido vitaminas para el estrés.
No obstante, el hijo del actor Rodolfo Sancho podría ser trasladado en breve a un penal mucho más duro.