El sueño de los padres de Lilia se truncó en el mar el pasado marzo, cuando partieron en una patera desde Argel. Samira y Kamel querían reunirse con la hermana de ella en Francia pero el mar les arrebató el sueño europeo. Tras las pruebas de ADN, el de Lilia, ha sido el último de los cadáveres que aquel naufragio recuperado.
El cuerpo de Lilia, en avanzado estado de descomposición y sin cabeza, apareció hace unos días en una playa de Tarragona. La pequeña, de 8 meses, vestía un body y un pañal, que ha ayudado en su identificación. Era de una marca que se vende en el Norte de África y Turquía. Una identidad que después ha confirmado el ADN.
Los bañistas de la playa de Roda de Berà pensaron al ver el cuerpo de Lilia que era un muñeco. Un operario de limpieza se dio cuenta de que era un cadáver.
El cuerpo de la niña apareció casi cuatro meses después del naufragio de su patera, en la que viajaba con sus padres, Samira, de 35 años, y Kamel, de 29 y 12 personas más, todos argelinos, salvo cuatro subsaharianos procedentes de Guinea Conakry.
Todos partieron sobre el 20 de marzo de Cherchell, un pueblo costero del norte de Argelia, en busca del sueño europeo. La embarcación en la que iban naufragó a solo 15 kilómetros de la costa balear días después.
Desde entonces se han ido encontrando cadáveres, el último el de Lilia, cuyo ADN ha podido ser cotejado con el de su madre. La familia tenía planeado llegar a España y de aquí ir hasta Francia, donde vive una hermana de Samira.
Los padres de Lilia, como las demás personas que iban en la embarcación, pagaron entre 5.000 y 7.000 euros por cada uno. Hacían la ruta argelina o del Mediterráneo occidental, poco conocida, pero cada vez más transitada.
Un reciente informe publicado por La ONG Caminando Fronteras cifra en 951 las personas muertas intentando llegar a España en patera durante el primer semestre de 2023. La mayoría iban rumbo a Canarias -778- y 102 en la ruta argelina hacia Levante y las Islas Baleares.
De la patera de Lilia, Samira y Kamel se han recuperado 13 cadáveres. Otros dos siguen en el mar.