Mientras en Lugo continúa el duelo por el fatal accidente ocurrido después de que un tren haya arrollado a un coche en un paso a nivel, –un suceso en el que una persona ha muerto y otras dos han resultado heridas graves–, en Moixent, Valencia, otro aparatoso siniestro ha provocado las alarmas al quedar un gran camión ardiendo colgado sobre un puente. Ha ocurrido en la carretera A-35.
En este último caso, afortunadamente los bomberos han conseguido extinguir las llamas y no hay que lamentar víctimas mortales.
Mientras, desde la Dirección General de Tráfico se incrementa la preocupación por las cifras de accidentes e infracciones.
El año pasado la cifra de fallecidos en las carreteras aumentó un 4% y se disparó áun más, de forma insólita, la cantidad de condenas por delitos contra la seguridad vial, hasta un total de 104.660, una cifra récord que la Fiscalía de Seguridad Vial atribuye a que nos hemos relajado demasiado al volante.
La falta de conciencia vial, apuntan, se traduce en esas más de 100.000 sentencias condenatorias, y nunca antes se había alcanzado esa cifra, que se incrementa un 10% en solo un año.
En total, casi 59.500 conductores han sido condenados por conducir bajo los efectos del alcohol y las drogas; un 8% más que en 2021.
Las condenas por conducir sin carnet, por su parte, son más de 38.000, disparándose en un 12%.
Por su parte, nueve de cada diez condenas son de conformidad, y casi de manera inmediata se ejecutaron 76.000 multas y trabajos para la comunidad.
Más allá, 68.000 conductores perdieron su derecho a conducir.
76.000 multas, más de 25.000 trabajos en beneficio de la comunidad y cerca de 68.000 conductores perdieron de manera temporal o definitiva el derecho a conducir.