La Policía Nacional de El Ejido ha auxiliado a un bebé que estaba atrapado en el interior de un vehículo familiar tras cerrarse las puertas de manera accidental. La mujer había parado frente a los juzgados “para hacer una gestión” cuando su hijo se quedó “encerrado” en el interior. Los agentes llegaron después de que la madre solicitase “ayuda, muy nerviosa” porque se habían “cerrado las puertas”.
Pese a que el coche “estaba arrancado y con el aire acondicionado puesto”, a la madre le preocupaba el calor y la humedad- por las altas temperaturas- que hacía en el interior. Los agentes actuaron rápido para evitar una trágica situación como la que ocurrió en Pontevedra.
La patrulla se encontró a la mujer “muy agitada” y al bebé llorando. Los agentes, tras analizar la situación, descartaron la idea de romper el cristal del vehículo por motivos de seguridad y para no “hacerle daño al niño”. Se optó por desmontar y manipular “con mucha destreza” las gomas aislantes y estancas de las ventanillas para acceder al interior. Al final el niño fue rescatado en buen estado de salud.