Las alertas por calor de los últimos días nos dan una tregua, pero son sustituidas por fuertes tormentas en Aragón y Cataluña.
Las fuertes lluvias han provocado repentinas crecidas de rieras como la que arrastraba un coche, afortunadamente sin ocupantes, en San Vicenç de Castellet, en Barcelona.
Hasta 156 litros por metro cuadrado han caído en la Cataluña central, con decenas de intervenciones de bomberos y equipos de emergencia. Pero donde la tromba ha sido más intensa, casi 60 litros en poco tiempo, ha sido en Manresa.
La Agencia Catalana del Agua (ACA) ha informado de diferentes crecidas de ríos en el Bages y del río Llobregat en Castellbisbal (Barcelona) hasta la desembocadura.