Algunos estudiantes con las notas de Selectividad 2023 ya en sus manos, comprueban sus calificaciones con el fin de lograr el mejor resultado posible, para después calcular su nota de corte y acceder a la carrera universitaria deseada. Aunque no siempre se consigue llegar a la nota de corte necesaria porque esta es muy alta, siempre se tiene la opción de acceder a un grado con la nota de corte más baja o presentarse de nuevo a las pruebas. Nunca se debe olvidar que los profesores y correctores también son humanos y pueden cometer fallos, por lo que, si se considera que ha podido haber un error, lo esencial es que se acuda a revisión para tratar de solventarlo con el docente. Para acceder a este tipo de revisiones hace falta seguir un proceso.
En el caso de asistir a la revisión del examen y estar suspenso, siempre se debe saber que existen otras posibilidades alternativas a la universidad.
Cada año, un gran número de alumnos se presentan a las pruebas de acceso a la universidad con el propósito de alcanzar la mayor nota posible, aunque a veces es suficiente con alcanzar aquella que permita entrar al grado deseado. El examen de EBAU se compone de cuatro exámenes (Lengua Castellana y Literatura, Lengua Extranjera, materia obligatoria específica de 2º de Bachillerato y se podrá elegir entre Historia de la Filosofía o Historia de España), y este es calificado inicialmente por docentes de instituto y de universidad escogidos por los presidentes de los tribunales y, aunque estos deben seguir unos criterios previos, tienen la última palabra en la nota final.
Si al revisar los resultados del examen los estudiantes no están conforme con alguna/s de sus calificaciones, podrán solicitar la reclamación de algunos ejercicios o una segunda revisión.
Estas revisiones consisten en volver a corregir de nuevo los exámenes de aquellas asignaturas que el estudiante quiera para así, poder verificar que todas las preguntas hayan sido correctamente puntuadas y que la suma de calificaciones sea la correcta. Por lo general, las personas que suspenden por pocas décimas o que aprueban pero con una nota menor a la que esperaban (y que por tanto, no les es suficiente para acceder a su grado), suelen ser las que más solicitan este tipo de revisiones en los exámenes de acceso a la universidad. La comprobación de los exámenes de selectividad es un proceso riguroso y estandarizado, que se lleva a cabo bajo estrictas normas de calidad y objetividad.
En caso de que la revisión sea solicitada, los exámenes los corregirá un profesor especialista distinto al que hizo la primera corrección. Si la diferencia de estas calificaciones supera los dos puntos, o si el estudiante quisiera una tercera verificación, será un tercer tribunal el que haga esta verificación. Tanto en la segunda como en la tercera verificación, el plazo máximo de resolución será de cinco días hábiles, contados a partir de la fecha de finalización del plazo de presentación de solicitudes. La calificación final del EBAU será la media de las calificaciones obtenidas en las dos correcciones, o en el caso una tercera corrección, será la media de las calificaciones obtenidas en las tres correcciones.
La revisión del examen se podrá solicitar tras haber obtenido los resultados del examen. Los estudiantes que consideren necesaria una corrección de la calificación obtenida en una o varias de las pruebas que componen el acceso, podrán solicitar ante la presidencia del tribunal una segunda revisión o una reclamación de los ejercicios que considere incorrectamente evaluados durante los tres días hábiles siguientes a la publicación de los resultados. Es necesario tener en cuenta que, si se presenta una solicitud de reclamación a un ejercicio, no se podrá solicitar una segunda corrección.
El plazo para presentar la solicitud de revisión de la calificación obtenida en una o varias de las pruebas que componen la evaluación será a partir del día siguiente de su publicación de los resultados y durante los tres días hábiles siguientes, según informa Micampus.
Lo más importante es conocer todos los criterios específicos de cada asignatura, al igual que es imprescindible saber que la nota, al igual que puede subir también puede bajar, por lo que si el alumno ve que corre un alto riesgo, es preferible que no lo haga.