Dani Alves continúa en prisión preventiva, a la espera de juicio, tras la presunta violación a una joven en la discoteca 'Sutton' de Barcelona la noche del 30 al 31 de diciembre del año pasado. El futbolista brasileño, de 40 años, lleva ya cuatro meses entre rejas. Desde que trascendió la acusación se han conocido las declaraciones contradictorias de la denunciante y el deportista, así como de sus allegados y defensas. Una de las voces que ha aportado detalles y prestado declaración en la investigación del caso ha sido la prima de la supuesta víctima.
La prima de la denunciante la acompañó aquella noche del 30 de diciembre. En abril señaló que la joven habló con ella "justo cuando Dani Alves ya había ido al lavavo" y que "cambiaron impresiones sobre si debería acudir o no" con él. Pero ahora, tras las nuevas declaraciones de la presunta víctima, en las que recuerda que pensó que el brasileño le haría mucho daño y que se quedó "en shock" durante la agresión sexual, ha dado nuevos detalles de los momentos posteriores y de la actitud de Bruno Brasil, amigo del futbolista.
La prima de la presunta víctima, según fuentes como 'En boca de todos', afirma que la joven, tras conocer a Dani Alves, comenzó a hablar más con él y le comentó cómo iba todo: "Estuvieron bailando. Ella me dijo que le estaba insistiendo en irse, que ella decía dónde y que él no respondía. Mi prima fue voluntariamente (al baño del reservado)".
Además, detalla que la chica no conocía las intenciones del futbolista: "Ella creía que iban a hablar y yo le dije: 'Ve y zanja el asunto'. Le hice un gesto con la mano. Pasaron 15 o 20 minutos. Dani volvió primero. Ella tenía mala cara".
Ante la situación, se fue con ella y le preguntó. Entonces, la joven de 24 años le dijo que "le había hecho mucho daño, que se había corrido dentro y que se quería ir". "Nos dijeron que había que activar el protocolo y ella no quería denunciar", ha precisado esta familiar de la denunciante, que también estaba en la discoteca 'Sutton'. Su declaración resulta clave en la investigación, ya que pone de manifiesto el miedo de la joven, que temía que al enfrentarse a un famoso nadie la creyese.
La prima de la denunciante también facilitó unos mensajes que intercambió con Bruno Brasil a los Mossos d'Esquadra. "Seamos hermanos. Mi casa está en ****. No estoy siempre, pero lo que necesites aquí estoy", le dijo el amigo de Dani Alves, días después de lo ocurrido.
Ella le contestó: "Muchas gracias e igualmente. Feliz año nuevo". Y es que los mensajes del chef carioca, que acompañaba al deportista en la noche de la presunta violación, también son relevantes para la investigación.
La abogada de la víctima asegura que la intención de Bruno Brasil era saber cómo estaba la víctima y, especialmente, si tenía intención de denunciar. En definitiva, una labor indagatoria. La joven no le identificó con nombres y apellidos en su declaración, pero sí dio una cuenta de una red social que correspondía a un cocinero. Casualmente, la que envió poco después mensajes a su prima. El "Seamos hermanos" de inicio, apunta la defensa, se interpreta como que las afectadas dejen pasar por alto lo sucedido.
La presunta víctima y su prima estaban acompañadas también de una amiga de la joven. Esta chica también ha indicado que Dani Alves habló con ellas desde el inicio en una actitud "babosa" durante la noche.
Lo que se sabe es que, tras la presunta violación, se activó el protocolo y el personal de seguridad le dijo al deportista y su amigo que abandonaran el establecimiento. Los agentes de los Mossos d'Esquadra recibieron el aviso de la discoteca y tomaron declaración a la joven a su llegada.
El brasileño, exjugador del FC Barcelona, Sevilla FC, Juventus y PSG, entre otros, sigue en la cárcel de Brians 2 de Barcelona ante el riesgo de fuga considerado por la jueza encargada del caso (acentuado en los últimos meses por el divorcio de Dani Alves y Joana Sanz) y las pruebas recabadas desde entonces. Se espera que el juicio se produzca este mismo año. Cuantos más detalles, todo parece complicarse más para el futbolista.