Dani Alves continúa en prisión provisional en la cárcel de cárcel de Brians II, de Barcelona, acusado de agredir sexualmente a una chica en la discoteca Sutton. El futbolista, que se encuentra plenamente adaptado a la vida dentro de prisión, se habría convertido en el protagonista un nuevo negocio que circula dentro de la cárcel.
La llegada de Dani Alves a la cárcel de Barcelona habría disparado "el tráfico de camisetas" de su anterior club, el F.C Barcelona. Así, según recoge El Caso, el futbolista estaría participando en este negocio de venta de camisetas, convirtiéndose en un protagonista clave al firmar las camisetas.
Para poder llevar a cabo este negocio, un preso recoge todas las camisetas del club procedentes de envíos de familiares o de mensajerías. Después, las lleva al módulo 13, donde se encuentra el futbolista, para que firme todos los ejemplares, y tras ello las vuelve a repartir por cada pabellón distribuyéndolas entre los presos.
El medio asegura que el añadido de esta firma suma un precio a la camiseta, que cada preso tendrá que pagar como se puede dentro de la cárcel, ya sea con tabaco o con otros productos. Según el medio, desde que llegó Dani Alves ha prisión los pedidos de estas camisetas se han cuadruplicado.
Dani Alves se encontraría "completamente hundido y muy nervioso” después de que su ya expareja, Joana Sanz, anunciara que se divorcia del futbolista.
La modelo canaria apoyó a su marido en los primeros momentos, incluso fue a verle a la prisión, sin embargo, finalmente Joana Sanz ha dado el paso de separarse definitivamente del futbolista.
Dani Alves no habría sabido digerir la noticia y eso “ha provocado que no se relacione con ninguno de los reclusos” y que “permanezca solo en los interiores de su celda”.