El Servizo Galego de Saúde (Sergas) ha sido condenado por el Tribunal Superior de Justicia de Galicia por la muerte de una mujer de 56 años a la que se le diagnosticó por error una lumbalgia cuando en realidad lo que padecía la mujer era un cáncer de pulmón. Fue la autopsia de la fallecida cuando los médicos descubrieron la causa real de la muerte y que en ninguna de las veces que acudió al médico le fue diagnosticado.
En la demanda presentada contra el Sergas se alega que la víctima de Ponteareas, Pontevedra, había acudido hasta 26 veces en tres meses a los distintos servicios de salud, tanto de urgencias como el médico de cabecera, donde únicamente fue tratada con analgésicos para una supuesta lumbalgia que le fue diagnosticada.
Según afirma La Voz de Galicia, la familia de la víctima (padre y dos hijos) deben ser indemnizados con 20.000 euros, 5.000 a cada hijo y 10.000 para el padre, además de los intereses de los últimos siete años, ya que el suceso tuvo lugar en 2005.
Los hechos sucedieron entre julio y septiembre de 2015. La fallecida acudió a su médico de cabecera por un fuerte dolor en la espalda, por lo que le diagnosticaron lumbalgia y le mandaron analgésicos.
Al ver que el dolor no remitía y se hacía cada vez más intenso, acudió en varias ocasiones más a la consulta, incluso llegó a ir a Complejo Hospitalario Universitario de Vigo, donde le hicieron una radiografía de columna. Aunque no le vieron lesiones óseas, sí otro tipo de lesiones poco claras, pero nunca más se le volvió a hacer una prueba radiológica.
En septiembre murió en su casa, pero no fue hasta la autopsia que vieron el cáncer de pulmón con metástasis en varios órganos.
La mujer era una gran fumadora que llevaba 30 años fumando entre 10 y 20 cigarrillos al día, un factor esencial para este tipo de cáncer, aunque el perito del Sergas afirmó que podía no guardar relación.