Baldo López y su novio, una pareja de ganaderos gays, iniciaron el pasado lunes una marcha de 110 kilómetros para protestar por la homofobia que dicen sufrir en su pueblo y este viernes han llegado hasta León. Acompañados de unas de sus vacas, salieron de su localidad, Tejedo del Sil, para plantarse esta jornada ante la Junta de Castilla y León.
Dicen que sufren discriminación por su homosexualidad: según han explicado, en el pueblo, los vecinos no permiten que sus vacas pasten en los terrenos comunales. Además, reciben insultos y burlas a diario.
"La travesía fue todo muy bien. Todos en los pueblos nos apoyaron mucho, la gente salía, nos dieron un sitio donde pudiera dormir la vaca", ha explicado Baldo sobre el recibimiento de otros municipios a sus protestas.
No piensan parar y piden respeto. "Vimos que teníamos la cuerda al cuello y que la solución -o intentar que fuera la solución- era salir a la calle. Quieren hacer ver que nosotros somos el problema, pero yo, por ser homosexual, creo que no soy el problema", ha sentenciado Baldo López. La pareja está recibiendo un gran apoyo, tanto en persona como a través de las redes sociales.