Todavía no se puede hablar de un incendio controlado, pero en Castellón la situación empieza a ser más favorable. Desde que la pasada noche empezaran a descender las temperaturas y a remitir las rachas de viento, los bomberos han podido avanzar en la extinción. Es una oportunidad que no pueden desaprovechar porque, en cualquier momento, la meteorología puede volver a reactivar focos y complicar, de nuevo, los trabajos.
En el sexto día de incendio suenan las primeras previsiones optimistas. "La noche y el día de mañana son fundamentales para frenar definitivamente el incendio", ha señalado Ximo Puig, presidente de la Generalitat valenciana. Es el tiempo que va a durar la tregua meteorológica con temperaturas bajas, vientos suaves y alto porcentaje de humedad. Condiciones favorables para tratar de controlar el fuego: "Que cuando vuelvan los vientos fuertes, en menos de 24-48 horas, tener mucho más sellado todo el incendio".
Hasta 500 medios terrestres siguen desplegados junto a las llamas. En puntos críticos como el área de Montán, donde siguen protegiendo el parque natural de la Sierra de Espadán. En otras zonas a las que no pueden llegar a pie son la veintena de medios aéreos los que tratan de minimizar el peligro. "Lo que hacen son unas descargas de agua y de retardante muy precisas y muy concisas", explican los especialistas.
Mientras, para los vecinos que siguen evacuados volver a casa sigue siendo un deseo al que todavía no pueden ponerle fecha: "Estamos deseando volver a casa". "Son muchos días y, dentro de lo que cabe, te va minando", agrega un hombre. "Tenemos que optar por la vía de la prudencia, que ninguna persona salga herida". Demasiados daños hay ya en el ámbito natural.