Cómo ha cambiado el rol de padre en las últimas décadas: del autoritario al presente

  • La progresiva incorporación al mercado laboral y a la vida pública de las mujeres ha motivado la evolución de la figura paterna

  • El 64 % de los españoles afirma que las responsabilidades del cuidado de los hijos se distribuyen equitativamente

  • El 78 % de los padres de hoy en día piensa que están más implicados en la crianza que las generaciones anteriores

Ser padre ya no es lo que era. Frente a la figura autoritaria y ausente de hace unas décadas ahora se muestran cada vez más comprometidos con sus familias. Y no es una apreciación al aire, hay estudios que certifican el aumento de implicación paterna en la crianza.

Y esto puede deberse a que ha cambiado la percepción en la sociedad. Si antes se les consideraba el cabeza de familia, y único aportador de ingresos, la progresiva incorporación al mercado laboral y a la vida pública de las mujeres ha motivado una evolución.

Es, al menos, lo que también percibe Pablo. "Ahora todo es distinto, mi padre era un padre ausente, su única preocupación era trabajar mucho para que tuviéramos dinero, pero nunca se ocupó ni de mi hermana ni de mi, eso era cosa de mi madre", comenta. Le escucha Ana (52) y comparte lo que dice: "Mi padre tenía dos trabajos, por la mañana y por la tarde y sólo le veíamos a la hora de cenar, en cambio mi pareja está super implicado en la crianza de mis dos hijas".

Aunque hoy en día las mujeres siguen asumiendo en gran medida el tema de los cuidados, los sociólogos defienden el concepto de "nuevos padres" en contraste con el padre tradicional. Padres que pasan más tiempo con sus hijos, tanto en tareas rutinarias, como en acompañamiento a actividades educativas o lúdicas.

Miguel (59) cuenta que el suyo era camionero y estaba siempre de viaje por lo que no podía estar pendiente de ellos. Era "otra época" comenta, en la educación y en el rol familiar: "Mi familia era absolutamente machista, mi madre hasta le ponía las zapatillas y yo podía estar tirado en el sofá mientras que mi hermana tenía que ayudar en casa", pero supo revertir lo que veía. Él siempre ha estado y está pendiente de todo lo que concierne a sus hijos de 26, 24 y 19 años. Cuando eran pequeños y ahora. "No podía concebirlo de otra forma", explica.

Además de la incorporación de la mujer al trabajo, diversas teorías sobre procesos de crianza coinciden en destacar la influencia de los padres en el desarrollo y comportamiento de sus hijos. Que los padres de hace 50 años fueran autoritarios ha podido tener su reflejo en el cambio de modelo. Es decir ese autoritarismo ha tenido sus consecuencias en la nueva implicación paterna. Tratar de no ser como lo que no te gustó o afectó. Por eso los hijos de esos padres que ahora son padres huyen del "ordeno y mando", los "nuevos padres" apuestan por una comunicación más abierta y afectiva con los hijos.

"Demasiado", según Pepe (58) quien considera que se ha evolucionado tanto que se ha llegado a "perder" el respeto. "Mis hijos (ya adolescentes) no me hacen ni caso, me hablan mal, a veces me insultan. Soy un don nadie en casa. Yo no tengo ninguna autoridad sobre ellos", confiesa.

Jaime sin embargo considera que, al estar más presentes, los padres de ahora pueden encontrar esos momentos de complicidad que da la cercanía y que sus progenitores no tenían: "Mi padre se iba por la mañana y volvía por la noche, el día a día era cosa de mi madre. Era el poli malo, la que se comía todo, pero también con la que compartíamos momentos de intimidad", cuenta.

En cualquier caso, ninguno de los entrevistados guarda mal recuerdo de sus padres, aceptan el papel que tuvieron en su vida, ausencias incluidas, pero a la hora de formar una familia todos han optado por otro modelo. "La crianza no es fácil pero yo tenía claro desde el principio que quería ser un padre presente", resume Jaime, una opinión que coincide con los resultados del "primer estudio que analiza cómo se sienten y cómo perciben los padres y madres en el mundo, promovido por Nestlé, y donde el 64 % de los españoles afirma que las responsabilidades del cuidado de los hijos se distribuyen equitativamente. Un dato que nos sitúa en la cabeza en cuanto al reparto de tareas entre los progenitores, incluida la crianza.

De acuerdo con este estudio, el 78 % de los padres de hoy en día piensa que ellos están más implicados en la crianza que las generaciones anteriores.