Solo unos días después de que se haya conocido la muerte de Noureddine El Attab, actor de series como 'La que se avecina' o 'El Príncipe', de una hipotermia severa tras caer al agua desde su barco en Castellón, nuevamente una noticia que guarda relación con embarcaciones y el campo de la náutica cobra atención mediática, aunque en esta ocasión por razones muy distintas y menos trágicas. En este caso, es la sorprendente decisión de un hombre de Es Castell, Menorca, la que se ha propagado desde las redes sociales al conocerse que, en un intento de ahorrarse unos cuantos euros, ha decidido subir su lancha a la terraza de su tercer piso para no tener que pagar el alquiler de su amarre.
De ese modo, el propietario de la embarcación, de seis metros de eslora, ha utilizado el espacio del que dispone en la residencia para, con una grúa, subirla hasta arriba, donde no ha pasado desapercibida para los vecinos.
Ante la sorpresa de muchos, desde las redes sociales este aficionado a la náutica ha explicado que, además de evitar el pago del amarre o una boya, puedo así dedicar más tiempo a la puesta a punto de la lancha.
“Me ahorro 70 euros al mes durante los cinco meses de invierno y lo reparo desde mi casa”, ha señalado, defendiendo que es legal lo que ha hecho dado que el peso de la embarcación es hasta diez veces menor de lo que puede soportar la estructura.
Entre tanto, el Ayuntamiento de Es Castell ya conoce la situación y ha indicado, según recoge EFE, que la normativa municipal no establece de forma específica que un vecino pueda tener su lancha en la terraza del piso, aunque ha advertido que “los técnicos de urbanismo se lo mirarán por si puede representar un peligro para la vía pública”.
Si así lo fuese, dictarán una orden de ejecución para que sea retirada del lugar cuanto antes.