Joana Sanz, la mujer de futbolista Dani Alves, ha denunciado el acoso que está sufriendo en redes sociales desde que se hiciese público en el encarcelamiento de su esposo por una supuesta violación a una joven en una discoteca de Barcelona.
Mientras que Alves cumple ya más de una semana en prisión y todas las pruebas confirman la versión de la joven supuestamente violada, los familiares del que fuese jugador del Barca están sufriendo un calvario.
Joana ya decidió el pasado jueves borrar de sus redes sociales todas las fotografías que tenía con su marido, pero a pesar de ello la canaria sigue recibiendo mensajes diarios de acoso donde se le acusa de ser “cómplice de un violador”
Desde su cuenta de Instagram ha publicado algunos esos mensajes que recibe donde incluso la piden que se “suicide”.
La modelo también ha querido destacar que a pesar de todo también recibe numerosos mensajes de apoyo.
"Aceptaré lo que venga. Me fui de casa con apenas 15 años. He superado en mi vida situaciones muy difíciles y complicadas. Esta será una más que pasará. No me asusta nada”, ha asegurado Dani Alves en prisión.
El brasileño ha compartido su postura sobre las visitas familiares estando detenido: por el momento no quiere recibir la visita de sus padres.
Especialmente, Alves no quiere que su madre, que se encuentra en un hotel de Barcelona, le visite en la cárcel, ya que "asegura sentir vergüenza" de que le visiten en prisión.