La Guardia Civil busca a los responsables de una macabro vídeo en el que varios individuos son duramente torturados

La Guardia Civil está investigando la procedencia de un macabro vídeo, difundido a través de las redes sociales, con el fin de conocer a sus autores. En este, se ve como varias personas agreden, humillan y, hasta, mutilan a dos hombres haciéndoles vivir un auténtico calvario, como el que padecieron tres secuestrados, entre ellos un menor, en México. Un vídeo con grandes manifestaciones violentas, que las fuerzas de seguridad creen que podrían pertenecer a un ajuste de cuentas.

La Guardia Civil está teniendo grandes dificultades para identificar tanto a los agresores como las víctimas, puesto que no existen denuncias de posibles perjudicados, así lo ha asegurado la la directora general de la Guardia Civil, María Gámez, al ser preguntada por esta cuestión en el acto de inicio de las obras del nuevo cuartel de la Instituto Armado en el municipio malagueño de Cártama, quien ha añadido que la Guardia Civil está en "conocimiento de esos vídeos donde se ven unas acciones violentas de unos individuos contra otros".

Amordazados, maniatados y semidesnudos

En las duras imágenes, se puede apreciar a un hombre propinando una dura paliza a otros dos varones que se encuentran amordazados, maniatados y semidesnudos. El agresor les propina sendos golpes en la cabeza mientras les graba; posteriormente las víctimas son interrogadas, pero aseguran "no saber nada" de lo que se les pregunta. Ante no recibir la información requerida, el agresor le corta la oreja a uno de ellos.

La ausencia de denuncias, ha señalado Gámez, dificulta la investigación, aunque todavía se está intentando localizar si estos hechos, presuntamente ocurridos en la provincia de Almería, son recientes o antiguos. Sin embargo, ha señalado con la poco información que tienen que "podría ser un ajuste de cuentas, aunque nos falta avanzar en ese sentido”, ha concluido.

Según han indicado a EFE fuentes cercanas al caso, el vídeo también esta siendo objeto de investigación por parte de los agentes de la Policía Nacional, ya que las presuntas torturas habrían tenido lugar en el término municipal de El Ejido (Almería), dónde residen al menos un par de las víctimas y en el que tienen competencias ambos cuerpos policiales, si bien no está claro aún si fue grabado dentro o fuera de la provincia almeriense.

Dichas fuentes han precisado que los hechos están vinculados al tráfico de estupefacientes, al parecer con un vuelco o robo de droga, de forma que los supuestos torturadores habrían buscado información sobre lo ocurrido con el estupefaciente desaparecido.