La popularidad de Dani Alves no ha dejado indiferente a nadie en la cárcel Brians 2, donde se encuentra en prisión provisional y sin fianza después de haber sido acusado de agredir sexualmente a una joven en una discoteca de Barcelona el pasado 30 de diciembre. El relato de la víctima ha sido siempre el mismo, asegurando que el futbolista le llegó a abofetear y a violar en un cuarto de baño.
Los abogados de Alves, mientras se siguen conociendo nuevos detalles de la investigación, han solicitado acceder a las declaraciones, prorrogando así que el plazo para presentar recurso no se cierre hasta el martes 31 de enero.
Un hombre que abandonaba este miércoles Brians 2, tras cumplir una condena de 14 años, mostró orgulloso a un equipo de Mediaset España una camiseta del Barça firmada por el brasileño, quien por cierto ha pedido no tener televisión en su celda para evadirse del exterior.
El expreso señaló que no había compartido módulo con el jugador, de 39 años, pero que consiguió la firma de Alves sin mucha dificultad a través de otras personas. En su puesta en libertad, el hombre también dijo que nadie le gritaba "violador" y se mostró escéptico acerca de la acusación contra el de Bahía: "Ese tío tiene muchos millones, puede irse con la que quiera. Aunque también se le pudo ir la cabeza".
El riesgo de fuga a su país natal, Brasil, donde no hay tratado de extradición con España, fue fundamental para su rápida encarcelación, pero también fueron determinantes otros motivos. Y es que Alves ha dado hasta el momento tres versiones de los hechos que habrían acontecido en la discoteca Sutton de la capital catalana.
El centro penitenciario Brians 2, donde se encuentra el exfutbolista de Sevilla, Barça, Juventus y PSG, entre otros clubes, cuenta con 14 hectáreas y fue construido en 2007. En ese terreno se incluyen 40 locutorios, 30 salas de visitas de familiares y 30 salas de visitas íntimas.
Las celdas son individuales y con baño privado. Entre sus instalaciones destacan aulas de informática, aulas de música, un gran auditorio para 250 personas, pistas polideportivas cubiertas, piscina, pistas de frontón, gimnasio cubierto, biblioteca y varios espacios para actividades libres.
Dicha prisión ofrece a los presos servicios como programas de educación social, actividades ocupacionales, estudios reglados y no reglados, además de actividades artísticas entre otras.