María del Mar Romero, alcaldesa de Marchena, localidad sevillana en cuya cabalgata murió ayer una mujer de 72 años y resultaron heridas once personas, ha apoyado al conductor del tractor accidentado que se encuentra anímicamente hundido. Lo ha hecho tras resaltar que tanto él -negativo en todos los test- y el vehículo -que tenía recién pasada la ITV- cumplía todas las normas y exigencias de seguridad previstas para el cortejo de los Reyes Magos. Tanto el tractor como el remolque que protagonizaron el suceso se encuentran custodiados en una nave que el Ayuntamiento ha puesto a disposición de la autoridad judicial para su examen pericial en el marco de la investigación.
La regidora, que ha decretado cuatro días de luto oficial en el municipio hasta el próximo 9 enero, ha explicado, que desde hace años, entre las muchas medidas de seguridad y las exigencias del plan de seguridad de la cabalgata, se hacen pruebas de alcoholemia "a todos y cada uno" de los conductores del cortejo antes de la salida. Estas medidas también incluyen el análisis de toda la documentación oficial y obligatoria de los vehículos, como los seguros obligatorios y la Inspección Técnica (ITV). "Este vehículo lo cumplía todo, al igual que su conductor", ha asegurado la alcaldesa, quien ha eludido formular una hipótesis sobre cómo pudo producirse el suceso.
Los testigos aún no olvida los sucedido y en su mente aún están los gritos y las llamadas nerviosas por teléfono en busca de familiares.
La alcaldesa , que ha trasladado en su nombre y en el del resto de la corporación el "profundo dolor, tristeza, consternación y aún incredulidad" ante el suceso, ha puesto a disposición de los familiares de la fallecida y del resto de heridos los servicios psicológicos municipales, así como toda la colaboración en los procesos judiciales que puedan derivarse. Visiblemente emocionada, la alcaldesa se ha referido al "profundo estado de ansiedad" en el que se encuentran, especialmente, las personas que encarnaban a sus majestades de Oriente y sus equipos, sobre todo el del rey Baltasar, cuya carroza fue la accidentada.
La alcaldesa ha apuntado que el consistorio se debe "replantear el formato" de la cabalgata y determinar si el uso tradicional de los vehículos agrícolas en estos actos "debe pasar a la historia", dado que, aunque todas las medidas de seguridad están contempladas, "el riesgo cero no existe". Según la Jefatura de la Policía Local, todas las carrozas disponían de un mínimo de dos voluntarios, en algunos casos cuatro, y las de los Reyes Magos contaban con dos auxiliares de seguridad, con monitores en el interior y a pie.
En el momento del suceso, ocurrido en una zona "bastante amplia", se encontraban la totalidad de los efectivos locales del turno, un total de seis, para un recorrido de unos cinco kilómetros con un plan de seguridad previamente establecido. Ha pedido a los vecinos que puedan tener imágenes del accidente que, en lugar de subirlas a las redes sociales, las pongan a disposición de la investigación judicial a fin de que puedan ofrecer mayor luz sobre lo ocurrido. La alcaldesa ha señalado que este jueves, sobre las 20.15 horas, "terminó la Navidad en Marchena" y, desde ese momento, ordenó suspender la cabalgata, apagar el alumbrado y la música ambiental, y clausurar las actividades previstas en la plaza, a lo que se suma el luto oficial decretado desde hoy hasta el próximo lunes.