Es la imagen del hombre que acuchilló supuestamente a su expareja que estaba a cinco días de salir de cuentas. Y lo hizo antes sus hijos de 13 y 14 años que avisaron de que papá había matado a mamá e intentaron que salvaran al bebé que llevaba en su vientre. De hecho, fue la hija de 14 años la que llamó a Emergencias tras presenciar el crimen.
A pesar de que ya no eran pareja, Elena y su expareja vivían bajo el mismo techo, porque ella tenía pánico a enfrentarse a él. Vivía bajo una amenaza constante que acabó cumpliendo. Lo que decía a los que le conocían era cierto: o mía o de nadie.
La realidad es que Elena estaba embarazada de otra persona y se había planteado dar el paso definitivo para comenzar de nuevo. En Escalona, en Toledo, todos sabía que ella tenía pánico a su expareja a la que denunció hace 13 años. La denuncia al no ser ratificada fue archivada. Y Elen seguía viviendo con su él. Entre llantos, en el pueblo se ha pedido unidad y no minimizar la violencia machista.
Los hechos se han producido en un día dramático. Con otro crimen machista en Vallecas, después de que otro hombre matara a su pareja y se fuera a dormir como si nada en Bilbao. Mes negro de violencia machista. Algo está fallando. Un total de 48 mujeres han sido asesinadas por sus parejas o exparejas en lo que va de año 2022 en España.
La Plaza del Infante don Juan Manuel de la localidad toledana de Escalona ha reunido este jueves a los vecinos del municipio para gritar "basta ya" a la violencia de género y clamar por la dignidad de todas las mujeres tras la muerte de una de sus vecinas, Elena.
A la concentración, convocada a las 12.30 horas y a la que han asistido un gran número de vecinos, han acudido el alcalde y presidente de la Diputación de Toledo, Álvaro Gutiérrez; la consejera de Igualdad y portavoz del Gobierno regional, Blanca Fernández; el delegado del Gobierno de Castilla-La Mancha, Francisco Tierraseca; así como el secretario de Organización del PSOE, Sergio Gutiérrez. Antes de proceder a leer un manifiesto, las personas concentradas en la plaza han guardado dos minutos de silencio en homenaje a Elena y su bebé.
"El día de ayer está teñido de negro en la historia de nuestro pueblo", ha comenzado diciendo el alcalde de Escalona, quien ha afirmado que la violencia de género, "una de las violencias más terribles porque se produce en las relaciones donde solo debe caber el respeto y la confianza", ha asesinado a Elena y a su bebé, al que le faltaban solo unos días para nacer. Además, ha lamentado que una niña de 14 años y un niño de 13 --los otros dos hijos de la víctima-- vayan a crecer "con la más terrible de las pesadillas", sabiendo que su madre perdió la vida atacada por su padre: "¿Qué puede haber más doloroso?", se ha preguntado.
Ante estos hechos, ha proseguido Álvaro Gutiérrez, el pueblo de Escalona "ni queremos ni debemos ponernos de lado", todo lo contrario, "mostramos nuestro más contundente rechazo, nuestra más profunda condena ante estos asesinatos y gritamos con rabia y dolor 'no a la violencia de género', 'no a los asesinatos machistas'".
"Nos hemos reunido en esta plaza, símbolo de convivencia, de respeto y de libertad, para denunciar este asesinato y para mostrar nuestro desprecio más absoluto al autor y nuestra solidaridad, empatía y cariño a los familiares de Elena y de su bebé, a sus amistades y, muy especialmente, a la hija y el hijo de Elena, para decirles que estamos a su lado, para que sientan el aliento de este nuestro pueblo y para que oigan sincera y rotundamente que no estarán solos, que tienen a su lado a todo el pueblo de Escalona", ha dicho.
Tras recordar que, solo en este mes de diciembre, ocho mujeres han sido asesinadas por sus parejas o sus exparejas y otros cinco asesinatos más están siendo investigados como posible casos de violencia de género, el alcalde escalonero ha defendido que la violencia de género existe y "no se puede justificar ni relativizar ni blanquear". "Existe, aunque muchas veces sea invisible al producirse en el silencio del hogar, en las relaciones que creemos de confianza", por eso, "cuando golpea tan de cerca paraliza el tiempo y nos introduce en una nube de indignación, rabia e impotencia".
"Hay que romper los muros del silencio ante la violencia de género", ha subrayado el alcalde, quien ha hecho hincapié en que muchas de las víctimas de los machistas no habían presentado ninguna denuncia previa y otras muchas "creen en el arrepentimiento del maltratador y la retiran o no acuden a las citas en los centros de ayuda a la mujer". A veces, "y es doloroso pensarlo", muchas mujeres se sienten avergonzadas de ser víctimas, ha advertido Gutiérrez.
En todos estos casos es "donde empezamos a perder la batalla contra el maltrato machista", ha abundado el regidor de Escalona, quien ha dejado claro que "la violencia de género no es un problema privado, no es doméstico, no afecta solo a unas pocas mujeres, afecta a la toda la sociedad y para erradicarla totalmente tenemos que implicarnos todos y todas", ha pedido el también presidente de la Diputación de Toledo.
"Es imprescindible", ha sostenido, incrementar la prevención desde las edades más tempranas, al tiempo que ha señalado que "es obligatorio" alzar la voz contra los maltratadores y mantener siempre una actitud de "tolerancia cero" contra el machismo y contra la violencia. "Es necesario seguir animando a las mujeres a denunciar al primer síntoma de violencia y a que no den marcha atrás", dicho. No obstante, ha recalcado que por muchos recursos, juzgados, pulseras, casas de acogidas, protocolos o ayudas económicas, "todo será insuficiente si no cambiamos nuestras conciencias", ha avisado.