Aitor García, único acusado por la desaparición y el asesinato de Janet Jumillas en marzo de 2019 en Cornellà de Llobregat ha comparecido este viernes ante la Audiencia Provincial de Barcelona en un juicio en el que la Fiscalía pide para él 19 años de cárcel.
Janet Jumillas, de 39 años y madre de dos hijos, desapareció el 13 de marzo. Su cuerpo fue encontrado casi tres meses más tarde por operarios de limpieza en un descampado propiedad de un banco donde estaban trabajando y avisaron a la policía.
Tras su desaparición y posterior denuncia, la policía catalana inició una investigación que concluyó dos detenidos: Aitor García, que es el principal sospechoso de su homicidio, en prisión provisional, y su amigo Cristian por presunto encubrimiento que fue puesto en libertad provisional. Las autoridades pusieron rápidamente la atención en Aitor. En el registro de su domicilio encontraron restos de sangre, una prueba clave.
Además, le siguieron y le fotografiaron ocho días después del crimen cuando arrojaban a un contenedor próximo a su casa varias pruebas que le incriminarían. Según ha revelado el sumario del caso, entre lo que encontraron los agentes había tres mochos de fregona manchados de una sustancia roja, una cuerda con pelos, vidrios de unas gafas y varios guantes de látex.
Tras recoger el contenido incautado y tras examinarlo, los investigadores descubrieron que la sangre de las fregonas perteneccía a Janet Jumillas. Además, los agentes de los Mossos d'Esquadra también llevaron a cabo una investigación entre varios locales que vendían gafas y en la que determinaron que los cristales encontrados tenían la misma graduación que la que necesitaba la desaparecida.