La justicia ha concedido la orden de alejamiento para la secuestradora del bebé del Hospital de Basurto tras un acuerdo entre las partes. La joven, de 24 años, ha ingresado en un centro psiquiátrico de Bilbao.
Los padres de Aimar, el bebé secuestrado en el Hospital de Basurto, habían pedido una orden de alejamiento de la secuestradora. Pedro, el padre, había explicado que tenían miedo de encontrarse con la mujer por la calle, y después de que el abogado de la defensa no se haya negado, el juzgado ha prohibido acercarse a menos de 500 metros de esta familia.
La joven, de 24 años, ha ingresado en el área de psiquiatría del Hospital de Basurto, del mismo del que se llevó a Aimar, después de acudir la noche del lunes a urgencias.
La autora confesa del rapto había quedado en libertad provisional el fin de semana, sin medidas cautelares, y después de que se rechazara también su solicitud de ingreso voluntario en un centro psiquiátrico. La jueza de guardia no consideró que hubiera riesgo de reiteración delictiva, ni de destrucción de pruebas.
Tras esta decisión judicial, su abogado anunció el lunes que su clienta había iniciado en el Servicio Vasco de Salud, Osakidetza, los trámites para su ingreso voluntario en un centro psiquiátrico. El letrado ha confirmado que el lunes por la noche acudió a las urgencias y desde entonces está hospitalizada.
La secuestradora fingió su embarazo y decidió secuestrar a Aimar, de solo un día de vida, del Hospital de Basurto, para hacerle ver a su familia y allegados que había dado a luz. Se llevó al pequeño de la habitación del centro sanitario haciéndose pasar por enfermera.
En su casa, estuvo haciéndose fotos y vídeos con el recién nacido y compartiéndolo con su familia y amigos. Durante el registro de su casa, la Policía autonómica vasca se incautó gran cantidad de objetos infantiles y de puericultura.