Las fuerzas de seguridad del país notificaron un aumento considerable de los delitos de odio con respecto a 2019. En total, la Policía Nacional, la Guardia Civil y los cuerpos autonómicos, registraron 1.724 delitos de odio. Generalmente con un impulso racista, seguido de la orientación sexual y la ideología de la víctima, que agrupan más del 85% de los casos registrados. Pero los delitos relacionados con la orientación o la identidad de género han sido los que más han crecido, un 67,6 por ciento.
El informe presentado por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, relacionado con la evolución de los delitos de odio en España, ha sentenciado que se ha producido un aumento de casos en 2021 con respecto a 2019, año de referencia estadística ya que 2020 estuvo marcado por la pandemia. Este informe ha detallado que en total se han registrado 1.808 sucesos relacionado con odio -1.724 delitos y 78 infracciones administrativas-.
Del total de delitos aportados por el Ministerio, la mayoría tienen un fin racista o xenófobo (639). Este tipo de casos ha aumentado un 24% con respecto a los documentados en 2019. En segundo lugar se encontrarían los relacionados con la orientación sexual o identidad de género de la víctima (466), estos son los delitos que han sufrido un mayor incremento con respecto al año de referencia, un 67,3%. Por otro lado, las agresiones asociadas a la ideología ha sufrido un descenso del 45,3% con respecto a 2019. Produciéndose un total de 326 casos.
Ante esta escalada de violencia de odio, el ministro del Interior, Marlaska, ha recalcado el aumento de delitos de odio que se han producido en nuestro país desde hace unos años. "La serie histórica nos demuestra una tendencia alcista desde 2014". También ha señalado la importancia de acudir a comisaria en caso de ser víctima de un delito de odio, ya que aún hay casos que no se denuncian "quedando 8 de cada 10 casos impunes".