Dos guardias civiles de Guadalajara están siendo investigados por una desproporcionada actuación contra el empleado de un bar porque creían que era un ladrón. Los agentes se encontraron al joven tomándose un helado jugando a una máquina tragaperras. De repente y como muestran las cámaras de seguridad, lo tiran violentamente al suelo antes de detenerlo.
David estaba en el bar donde trabaja en Molina de Aragón, Guadalajara. De repente, dos guardias civiles cuestionan su presencia a las casi 4 y media de la madrugada y sin más , uno de ellos lo tira al suelo. Lo inmoviliza, se pone los guantes, lo gira boca abajo y se sienta encima. David recuerda la agresión: "Creían qu estaba robando, me puso la mano hasta que perdí la respiración".
Mientras un guardia inmoviliza a David, el otro le coge de las piernas para esposarlo. Lo arrastran para sacarlo a la calle. David ahora necesita atención psicológica. Aún piensa que le están estrangulando.
En su atestado los agentes declaran que el joven cometió un delito contra la autoridad, dicen que: ”estaba muy nervioso y que se golpeó el mismo la cabeza en el suelo tras resistirse fuertemente al traslado fuera del local”. Pero el parte de lesiones es claro, suficiente con las imágenes de seguridad para que la jueza investigue a los dos guardias por delitos de falsedad documental y lesiones. La Guardia Civil les ha abierto expediente disciplinario, a la espera de la decisión judicial,.