En este jueves 22 de septiembre de 2022 se han cumplido nueve años del crimen de la pequeña Asunta Basterra, la menor que fue asesinada por sus padres cuando solo tenía 12 años. El cadáver de la niña fue encontrado por dos hombres en una cuneta de un camino forestal de la localidad gallega de Teo, en A Coruña, muy cerca de la casa familiar donde se produjeron los hechos.
El día del asesinato de la pequeña Asunta, tanto su padre, como su madre, como ella comieron en el piso de Basterra y fue allí donde la drogaron con Orfidal, un medicamento que tomaba Rosario Porto pero que fue comprado por Alfonso Basterra. A media tarde, una cámara de seguridad grabó a madre y a hija de camino a la casa de Teo donde la niña fue asfixiada.
Lo que aún se desconoce es el móvil del crimen aunque el fiscal sostuvo en su alegato final que a la madre le estorbaba la hija y que Alfonso Basterra haría cualquier cosa por Rosario Porto. El crimen conmocionó a toda España. La madre, Rosario Porto, se suicidó en la cárcel y su padre sigue negando la implicación.
Ahora, nueve años después Alfonso Basterra estaría a punto de obtener permisos penitenciarios. El padre de Asunta Basterra continúa en la cárcel de Teixeiro, en A Coruña, en un módulo para presos peligrosos.
Se conoce que Alfonso Basterra ha pedido en varias ocasiones permisos para poder salir de presión pero siempre le han sido denegados. En concreto, Alfonso Basterra y Rosario Porto solicitaron permisos para abandonar la cárcel en dos ocasiones cuando se cumplió un cuarto de su condena, en 2018.
Debido a su pena de cárcel, no se espera que el padre de Asunta pueda disfrutar de estos permisos y así salir de prisión hasta 2025.
Instituciones Penitenciarias estudió aplicar el protocolo antisuicidios a Alfonso Basterra, el exmarido de Rosario Porto, en 2020 cuando se tuvo conocimiento de la muerte de su exmujer en la cárcel de Brieva, en Ávila.
Según han informado fuentes del caso, Rosario Porto utilizó una tela para suicidarse amarrándola a la ventana de su celda. Estas mismas fuentes precisaban que no tenía 'preso sombra' desde poco después de ser trasladada en marzo a este centro penitenciario de mujeres, ya que el equipo de psicólogos determinó que podía hacer vida normal con el resto de internas en un módulo ordinario.
Tras tener conocimiento de lo sucedido, a Alfonso Basterra se le podría aplicar el protocolo antisuicidios en la cárcel de Teixeiro, donde se encuentra y en la que estuvo con anterioridad Rosario Porto.
El crimen se convirtió en uno de los casos más mediáticos de España. Sobre todo, cuando se detuvo a Rosario Porto, madre de la pequeña, después de la incineración de la niña. Al día siguiente, la Policía decidió detener al padre de Asunta.
El matrimonio era muy conocido en Santiago de Compostela, ella era una abogada y él un conocido periodista vasco. Tanto Rosario como Alfonso, siempre negaron ser los responsables de la muerte de la niña. Sin embargo, sus versiones contradictorias pusieron sobre ellos las pistas de los investigadores.