Finalizado agosto, el otoño está a la vuelta de la esquina. Con esta estación llega el cambio de hora. ¿Cuándo será este año el cambio al horario de invierno? El BOE tiene publicado los cambios de hora hasta 2026.
El 30 de octubre pasaremos del horario de verano al de invierno. Es decir, a las 12 de la noche del sábado al domingo de este último fin de semana del décimo mes del año, se retrasará una hora. A las 3 de la madrugada serán de nuevo las dos.
Así que con la llegada del horario de invierno dormiremos una hora más. Eso sí anochecerá antes. Los relojes con tecnología digital y los móviles se cambian automáticamente: no hay que hacer nada.
Está establecido que cuando serán los cambios de hora en España hasta 2026. La Unión Europea, de hecho, pretende que todos los estados miembros fijen su calendario cada cinco años.
Así más allá de este domingo 30 de octubre, los siguientes cambios de hora serán; en 2023, el 29 de octubre; en 2024, el 27 de octubre, en 2025, el 26 de octubre y en 2026, el 25 de octubre.
Desde hace mucho el cambio de hora tiene detractores y defensores.
Este cambio de hora se estableció para adaptar las horas de trabajo a las de mayor hora solar y así ahorrar energía. El Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDEA) calcula que en España gracias a los cambios de horario se ahorra un 5% de energía, es decir, unos 300 millones de euros.
Este año, en plena crisis energética por la guerra de Rusia contra Ucrania, puede que la medida tenga algo más de sentido, sobre todo en los países europeos que acaban la jornada laboral mucho antes que España, que se alarga en muchos casos hasta las 20 horas o más. El comercio, por ejemplo, cierra a las 21 ó 22 horas.
Esto es lo que señalan los detractores del cambio de hora, que admiten que a la industria puede serle útil pero no al sector servicios. Además, señalan que cuanto más tarde anochece, la población tiende a tener más vida social, lo que beneficia directamente a los comercios.
Entre los detractores del cambio de hora, también están quienes argumentan que es nocivo para la salud vivir en una franja horaria no alineada con los relojes biológicos. El pasado año, en la Barcelona Time Use Initiative, su coordinadora, Marta Junqué, dijo que hay que “acabar con el cambio de hora, que tantos efectos nocivos tiene para la salud, el sueño y el 'jet lag' social (descompensación horaria) que padecemos".