Llegan los primeros voluntarios para ayudar tras el mayor incendio del año. "Hemos traído víveres para los animales, que se han quedado sin pasto", explica uno de los voluntarios. La cifra, abruma. En poco más de un mes, Zamora ha visto arder más de 56.000 hectáreas de su territorio. Recorremos, por la N-631 que estuvo cortada, la distancia entre lo que ardió aquella vez y ahora. Entre un punto y otro hay menos de 20 km.
"Rodeó el pueblo y no ha dejado nada por ningún sitio", nos comenta un vecino. Zamora concentra el 60% de la superficie forestal quemada en España en este 2022. "Y eso se va a tardar mucho en recuperar, porque ha habido mucha pérdida en fauna y en biodiversidad. Va a tardar años y años en recuperarse", nos relata Antonia del Campo, técnico agente medioambiental a la que a duras penas puede contener su emoción.
Animales muertos. 34 pueblos desalojados. Más de 6.000 vecinos. Casas destrozadas, sin cobertura.
Por eso nos ha costado tanto localizar a Laura Fernández Gago. Es apicultora. El fuego pasó por encima de sus colmenas. "Tengo diez asentamientos y ha pasado el fuego por nueve. Ahora tengo que sacar todas las colmenas de aquí porque no hay nada para comer para ellas".
Desde su casa nos enseña cómo ha quedado todo. "Esto es un mazazo. El campo ha quedado vacío". Todo esto y el olor a ceniza tardará en olvidarse.