Cincuenta incendios han llegado a estar activos en lo que llevamos de domingo en Cataluña. El que más sigue preocupando es el de Artesa de Segre que ha calcinado ya más de 2 700 hectáreas y que sigue sin control, aunque se confía en que pueda quedar estabilizado antes del lunes ya que las temperaturas son algo más bajas y la humedad un poco más alta. Los Bomberos insisten en que la situación sigue siendo crítica. Además, las labores de extinción podrían complicarse tras haberse declarado dos nuevos incendios en las últimas horas: en Peramola y en el centro de Lérida.
Los Bomberos han trabajado por cuarta noche luchando contra las llamas en Artesa de Segre, donde el fuego ha devastado ya 2 700 hectáreas. La situación era muy complicada. “El viento de sur ha llegado y ha generado que el fuego se incrementase”, ha apuntado Bernat Solé, delegado de la Generalitat de Cataluña en Lérida. A pesar del viento sur, los equipos de extinción han logrado mantener el fuego perimetrado.
Ya de día y con condiciones meteorológicas más favorables, trabajan para estabilizar la cola del flanco derecho y la cabeza del incendio, pero la inquietud aumenta entre los vecinos. “Esto no puede ser, tantos días quemando, porque va arrasando todos los bosques que hay”, comenta uno; mientras otro expresa que “la gente lo vive con cierta preocupación”.
Desde el miércoles, Cataluña ha sufrido 60 incendios diarios de distinta magnitud y se teme que puedan desencadenarse más en las próximas horas, cuando se esperan rachas de viento que pueden alcanzar los 70 kilómetros por hora.
Por ahora se ha logrado estabilizar el del parque natural de El Garraf, donde se han quemado más de 130 hectáreas. A las seis de la mañana comenzaba este otro en Horta de San Joan, Tarragona, también estabilizado en tres horas con un helicóptero y diecisiete dotaciones terrestres.