Medios aéreos de extinción se han incorporado a partir de las ocho de la mañana de este sábado a los trabajos para sofocar el incendio forestal de la reserva de la Sierra de la Culebra, en la provincia de Zamora, que sigue sin control y con 14 localidades ya desalojadas, que suman 1.733 vecinos.
Los medios de extinción nocturnos han vivido una noche "dura y de intenso trabajo" y, aunque el incendio continúa activo, a primera hora de la mañana de este sábado presentaba menos virulencia que por la noche y la altura de las llamas había disminuido en algunas zonas, según fuentes del operativo de extinción.
El incendio ha provocado que desde el viernes por la noche esté cortada al tráfico la carretera Nacional 631 entre los kilómetros 32 y 49, entre Litos y Villanueva de Valrojo.
Tampoco se puede circular por las carreteras ZA-912 entre Villardeciervos y Mahíde, la ZA-P-1407 entre Sarracín de Aliste y Ferreras de Abajo, la ZA-P-2639 entre Villardeciervos y Val de Santa María, según la Dirección General de Tráfico (DGT).
A lo largo del viernes, desde la madrugada hasta última hora de la noche, se fueron sucediendo los desalojos de poblaciones amenazadas por las llamas y el humo a medida que avanzaba el incendio y la madrugada del sábado vecinos de catorce núcleos de población han tenido que pasar la noche fuera de sus casas.
Tras desalojarse el último de ellos, Flechas, una pequeña pedanía de una docena de habitantes, las localidades afectadas suman una población de 1.733 vecinos, según datos del último censo del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Además de Flechas, a lo largo de la tarde y la noche de este viernes se ha evacuado a los vecinos de Cional, Codesal, Villanueva de Valrojo, Ferreras de Arriba y Ferreras de Abajo.
Previamente, al mediodía fueron desalojadas las localidades de Boya y Villardeciervos y en la madrugada del viernes las de Cabañas de Aliste, Palazuelo de las Cuevas, Pobladura de Aliste, La Torre de Aliste, San Pedro de las Herrerías y Mahíde.
Parte de los vecinos de esta poblaciones han pasado la noche en casas de familiares y allegados o segundas residencias mientras que unas 400 personas lo han hecho en pabellones deportivos de Alcañices, Camarzana de Tera y Benavente.
Entre los desalojados también figuraban las personas mayores de dos residencias de la zona, que han sido realojadas temporalmente en centros residenciales de Benavente y de La Bañeza (León).
El incendio ha afectado a naves ganaderas, infraestructuras de telecomunicaciones, una casa deshabitada que se ha quemado y a la base de incendios de Villardeciervos, desde la que tuvieron que trasladarse a otro lugar siete helicópteros para evitar que quedaran inutilizados al no poder despegar por el humo.
Las últimas estimaciones de la extensión del incendio, a falta de lo que hayan avanzado las llamas a lo largo de la última noche, han apuntado a cerca de 20.000 hectáreas carbonizadas, la mayoría de pino, monte bajo y matorral, pero también zonas de castaños y algunos campos de cultivo.
Las altas temperaturas y el viento del sur no invitan al optimismo.