Investigadores del Grupo Español de Cáncer de Pulmón (GECP) han constatado en su estudio 'NADIM', publicado en la revista 'The Lancet Oncology', que administrar quimioinmunoterapia antes de la cirugía en pacientes con cáncer de pulmón en estadios intermedios (que pueden ser operados, pero en los que el tumor ya se ha diseminado a ganglios circundantes) duplica los resultados con respecto al tratamiento tradicional que es el estándar actual (quimioterapia tras cirugía).
"Estamos hablando de volver curables tumores potencial y mayoritariamente letales", afirma el doctor Mariano Provencio, presidente del Grupo e investigador principal. Para el investigador, "se abre la puerta a un cambio en el abordaje terapéutico a nivel global que permitiría aumentar el número de pacientes que finalmente pueden curarse".
El 89,9% de los pacientes incluidos en el estudio sobrevivió a los dos años y un 77% no tuvo progresión de la enfermedad en este periodo. Además, un 63,4% de los pacientes incluidos tuvo una respuesta patológica completa del tumor cuando se realizó la cirugía (ausencia del tumor). "Estas tasas suponen casi el doble de supervivencia de lo registrado hasta ahora con el abordaje tradicional. Esto es importante porque solo un 30% de los pacientes sobrevivía a los tres años", detalla el presidente del GECP.
El estudio 'NADIM' también ha evaluado la seguridad de este esquema de tratamiento, que según los investigadores del GECP es seguro. "El efecto secundario del tratamiento (eventos adversos) solo se dio en el 30% de los pacientes y no interfirió en la cirugía posterior", explica Provencio.
Además, los investigadores creen que esta estrategia confiere protección al paciente ya que la presencia de la masa tumoral completa al inicio de la inmunoterapia permite la inducción de una respuesta antitumoral adaptativa más fuerte y el desarrollo temprano de la memoria inmune que puede proporcionar protección a largo plazo al paciente.
Hasta ahora, el cáncer de pulmón, pese a diagnosticarse en estadios localmente avanzados, era una enfermedad terminal, con pocas perspectivas de supervivencia a largo plazo. Tal y como asegura Mariano Provencio, "las investigaciones hasta ahora se habían focalizado en fases avanzadas del tumor, por lo que en los últimos 20 años no había habido ningún avance hasta la llegada de 'NADIM'".
"Es la primera investigación a nivel mundial que ha analizado los beneficios (viabilidad, seguridad, eficacia y supervivencia) de administrar quimioinnumonetarpia antes de cirugía a pacientes con cáncer de pulmón en estadios iniciales o localmente avanzados. Hasta ahora, la eficacia de este tratamiento no se había testado y los pronósticos de supervivencia y curación en este grupo de pacientes (el 20% de todos los casos) eran muy pobres", concluye Provencio.