Las secuelas indirectas de la pandemia de covid se traduce en fallecidos por los retrasos y cancelaciones de operaciones cardiológicas programadas durante la primera ola. La mortalidad en pacientes diabéticos que estaban a la espera de una intervención se han triplicado.
Un total de 2.158 pacientes de 37 hospitales españoles, de los cuales un 32,4 % tenía diabetes. A todos ellos se les hizo un seguimiento de 45 días para analizar las consecuencias de la cancelación de los procedimientos cardiológicos, según un estudio de la Asociación de Cardiología Intervencionista de la Sociedad Española de Cardiología (ACI-SEC).
La investigación analizó el impacto que tuvo la cancelación y retraso de procedimientos programados, sin carácter de urgencia, en la mortalidad de los pacientes, a raíz de la declaración del estado de alarma.
La tasa de mortalidad de los pacientes con diabetes "por todas las causas" fue del 3% frente al 1% de los no diabéticos. Por afecciones cardiovasculares, la mortalidad fue del 1,9 % en los enfermos de diabetes mientras que apenas rozó el 0,4 % en los no diabéticos.
El especialista Raúl Moreno, presidente de la ACI-SEC y principal autor del estudio ha explicado que "el mal pronóstico de la diabetes en estos pacientes se observó con independencia de la patología que estaba pendiente de tratarse". Además, la proporción de pacientes diabéticos que tuvo que ser atendido de urgencia por un empeoramiento de su patología al haberse retrasado su intervención fue del 10,4 %, tres puntos más que en el caso de los no diabéticos.
Las conclusiones del estudio también revelan que los pacientes con diabetes tenían una mayor prevalencia de hipertensión, hipercolesterolemia, insuficiencia renal crónica, enfermedad arterial periférica, enfermedad de las arterias coronarias, incluido un infarto de miocardio previo.
Según el doctor Moreno, "la disfunción ventricular izquierda era también más frecuente entre los diabéticos y estos tenían con mayor frecuencia enfermedad multivaso". El presidente de la ACI-SEC, ha reclamado para los diabéticos "prioridad" en procedimientos cardiológicos intervencionistas, como así lo evidencian los resultados del estudio.