La pandemia del coronavirus ha cambiado el mundo tal y como lo conocíamos, y también está cambiando nuestra forma de vida, con nuevas costumbres que antes no teníamos. Así, la mascarilla y la distancia de seguridad se han convertido en parte de nuestro día a día.
A la hora de hacer la compra, los hábitos también han cambiado. El 55% de los españoles gasta entre 25 euros y 55 euros a la hora de hacer la compra semanal, y la mayoría reconoce que se ha dado algún capricho en forma de comida durante la semana en el confinamiento por la crisis sanitaria del coronavirus.
Todavía nos estamos adaptando a esta nueva realidad, y por ello seguimos cometiendo algunos errores en el supermercado, recogidos por Business Insider.
Un estudio muestra el cambio en los hábitos gastronómicos de los españoles en los días y horas para pedir comida a domicilio. Si antes del confinamiento el día más demandado era el domingo, ahora es el sábado cuando se hace más pedidos.
Respecto a las horas, el cambio ha llegado con la desescalada, pues los pedidos se han retrasado y ya la hora más solicitada es entre las 21.00 horas y las 22.00 horas, dejando libre las 20.00 horas al ser considerada la 'hora del paseo'.
OCU no ha detectado rastros de coronavirus en los envases de alimentos y productos de droguería adquiridos durante la última semana de abril en ocho cadenas (Alcampo, Carrefour, Condis, Dia, Eroski, Mercadona y Supercor) de Madrid, Barcelona, Vitoria y La Coruña.
En concreto, la organización de consumidores ha analizado la presencia de coronavirus sobre la superficie de 66 alimentos y productos de droguería de gran consumo: harinas, tabletas de chocolate, bolsas de patatas fritas, barras de pan, latas de cerveza, manzanas a granel, papel higiénico, yogures, ensaladas envasadas, tortillas precocinadas, barquetas de carne y salmón ahumado.
Los resultados, obtenidos mediante pruebas genéticas PCR a partir de muestras recogidas de la superficie de los productos seleccionados, revelan la ausencia total de restos de coronavirus.
Según OCU, es muy probable que las medidas de higiene promovidas por los propios supermercados, como la limpieza periódica de las superficies y el uso de guantes y mascarillas hayan ayudado a reducir este riesgo.
No obstante, la organización de consumidores recomienda seguir manteniendo medidas de precaución en los supermercados, empezando por mantener la distancia con otros usuarios, usar guantes y mascarilla, y evitar tocarse la cara.